Pipa, un callejero que vivía en Mina Clavero, tuvo un cambio rotundo de vida en pocos días. Los artífices de todo ésto fueron sus adoptantes y la fundación ADMA de nuestra ciudad a través de sus voluntarios, que no dudaron en darle contención a la mascota y ayudar con los trámites necesarios para que pueda viajar con su nueva familia a Estados Unidos.
«Nos escribe Cathy contándonos que habían venido de vacaciones y encontraron una perrita en la calle. Esta gente tiene familia en Río IV, así que de Mina Clavero se la llevan a Río IV donde tampoco tenían donde tenerla, y nos escriben desesperados porque tenían que volverse a su casa y no sabían que hacer. Entonces le pregunté que si les ayudábamos a hacer los papeles no se animaban a llevársela con ellos. Me contesta que sí, pero que había averiguado y era muy difícil todo lo que había que hacer y no llegaban con los tiempos. Porque ésto estaba pasando un martes y ellos se iban el viernes. Ellos ya la habían llevado a un veterinario y la habían hecho vacunar. Ese mismo martes se vienen desde Río Cuarto a casa, me dejan la perrita para que se las cuide y me entregaron todos los certificados, fotocopia del pasaporte, y todo lo necesario para hacer los papeles», cuenta Jimena, voluntaria de ADMA.
La buena voluntad hizo que todo estuviera listo para el viaje, y este viernes se juntaron en el aeropuerto donde Pipa viajó con su nueva familia a Miami.
«Le hicimos el certificado de buena salud, con eso fui al SENASA donde nos explicaron todo lo que hacía falta para que la perra pudiera ingresar al país, pagamos la tasa y nos pusimos a buscar una jaula, encontramos una por Mercado Libre, ellos la compraron y la chica que la vendía me la alcanzó a mi trabajo. El jueves ya estaba listo el certificado para que la perra pudiera salir del país, y el viernes nos fuimos con todos los papeles de Pipa y su jaulita al aeropuerto y se las entregamos», continuó Jimena haciendo referencia a los detalles de una historia que arrancó el 1º de enero y continuó con el despegue del avión este viernes.
Horas después, el video de Pipa ya instalada en su nuevo hogar llegaba a Alta Gracia como una forma de reconocimiento al trabajo realizado. »
Mirá la historia en este video hecho por la gente de ADMA:
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