Durante la noche de este domingo, se llevó a delante la tradicional vigilia de los ex combatientes de Malvinas; pero esta vez con muchos cambios. Cambios que sentaron bien no solo en la familia y amigos de los ex combatientes; sino también en la gente en general, y ésto se vio reflejado en la cantidad de personas que anoche, a pesar de la lluvia, se acercó a acompañarlos.
Distintos números artísticos, una muestra fotográfica y charlas, fueron algunas de las actividades que se llevaron adelante en una carpa dispuesta a pocos metros del monumento, ubicado en Agustín Aguirre y Bv. Alfonsín.
Para finalizar, y luego de que Marcelo Trucco, un pequeño estudiante, cantara el Himno Nacional, los ex combatientes, acompañados de voluntarios de ADMA y otras fundaciones de la ciudad, invitaron a un grupo de niños a soltar 36 globos, globos que reemplazaron a las bombas de estruendo este año.
«La verdad, pensamos que iba a ser más difícil la decisión, pero no fue así. Por fin entendimos que la Patria es el otro. Luego de hablar con la gente de ADMA y que ellos nos explicaran cuales eran las dificultades en tirar las bombas, no solo por los animales, sino también por los ancianos, niños y personas con discapacidad; lo hablamos y no hubo problema en suspenderlo», subrayó Gustavo Díaz, uno de los ex combatientes; y autor del monumento a los caídos que se exhibe en esa intersección, y agregó que el año que viene se pensará con tiempo en otra forma de vivir ese momento.
El artista Julio Incardona también dijo «presente» y sus próceres estuvieron exhibidos en el predio del ferrocarril. «El arte como herramienta de difusión y un forma de expresión que permite tomar conciencia del valor de los hechos de la historia de nuestra Patria, desde nuestros grandes héroes como San Martín hasta cada soldado qué dejó su vida en Malvinas. » Los artistas debemos estar al servicio de los grandes héroes y protagonistas de nuestra historia», subrayó el escultor, autor de los próceres que han recorrido distintas partes del país.
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