Un importante número de vecinos salió a la calle durante la noche del martes para solicitar justicia tras la muerte del Padre Luis y reclamar además, mayor seguridad.

Con carteles y velas, se concentraron en plaza Solares alrededor de las 20 hs y luego marcharon hasta la comisaría, donde solicitaron la presencia y palabra de quien está a cargo de la Departamental Santa María en la actualidad, el mayor, Luis González.

A pedido de la gente, González se hizo presente y le habló a los manifestantes asegurando que «se va a hacer todo lo posible para esclarecer la muerte del sacerdote», y que «están trabajando en ello»
Uno de los momentos más emotivos fue cuando un niño de tan solo 10 años de edad, le habló a la autoridad policial, pidiéndole que encuentren al asesino.
Posteriormente los manifestantes bajaron por calle España hasta San Martín y luego subieron por Av. Belgrano hasta plaza Solares, donde se apostaron frente a la iglesia de la Merced a rezar y repetir: «Justicia por el padre Luis»
Cabe destacar que solo oraciones,cánticos religiosos y pedidos de Justicia fue lo que caracterizó a una pacífica marcha que convocó cientos de personas.

Las novedades
Hasta el momento no hay más novedades con respeto a la investigación, solo se conoció que el día martes el departamento de Criminalística de la Policía de la provincia de Córdoba, habría secuestrado más elementos de la casa del religioso; además, se supo que él o los que ingresaron a la vivienda se llevaron algunas cosas y que no lograron robar el dinero que estaba dentro de uno de los libros, a pesar de que muchos se encontraban en el piso.

Tanto la Policía como la Justicia se encuentran abocados a la investigación y reiteran que todo aquel que pueda aportar elementos a la causa se acerque a Tribunales o la Comisaría.

Recordemos que el fiscal que entiende en la causa, Emilio Drazile, confirmó el domingo a RESUMEN que la muerte del sacerdote fue un homicidio; horas después se conoció un informe preliminar de la autopsia que determinó que fue por ahorcamiento.

El hallazgo macabro fue el sábado por la tarde. Algunos feligreses se dirigieron a la vivienda del religioso debido a que se encontraba demorado a la misa de las 18 hs que debía presidir. Al llegar encontraron al sacerdote sin vida y un espeso humo dentro de la casa.

Él o los autores del terrible crimen habrían prendido fuego para borrar las pruebas, aunque este alcanzó a quemar solo parte de algunos muebles y luego se apagó.
La primera hipótesis hasta el momento es que se trató de un robo