Rodolfo González, se desempeña en la Dirección de Conducta Policial de la Provincia y, ahora, el mismo fue denunciado. Se trata de quien fuera Jefe de la Departamental Santa María en el año 2015, y luego le dejó el lugar a su par Luis González quien era su segundo, para irse de servicio a Bomberos d ela Provincia.
González, quien también es vecino de esta ciudad, habría chocado con un automóvil de la fuerza a otro vehículo y amenazado a sus ocupantes para que no lo denunciaran. Y, ahora, el tribunal de disciplina para el personal policial y penitenciario instruye una causa para investigar su presunto comportamiento.
A este comisario se le atribuye una serie de irregularidades cuando manejando un vehículo oficial no identificado chocó por alcance a otro automóvil en Carlos Paz.
González, según los antecedentes, volvía en horas de la madrugada de Tanti donde había comido un asado con unos amigos.
Las versiones aseguran que el comisario se bajó de su vehículo y amedrento a los ocupantes del otro rodado, que eran menores, para que no lo denunciaran.
El accidente que no provocó heridos tuvo testigos quienes aseguraron que pocos minutos después González siguió su camino rumbo a Córdoba como si nada hubiera pasado.
No ocurrió lo mismo con los familiares de los chicos que dejaron una constancia en la comisaria de Carlos Paz que lleva el número 123/2019.
Aquí lo que quedan flotando son varios interrogantes:
¿Qué hacia el comisario González con un vehículo policial en una función no propia de un oficial superior? ¿Podría configurarse el delito de peculado? ¿Por qué no dejo en la comisaria de Carlos Paz el vehículo para que fuera peritado, como debiera haber hecho, y en cambio lo llevo al departamento automotores para que lo arreglen a cuenta de la sociedad cordobesa?
¿Por qué oculto el episodio cuando existe un protocolo que ordena a todo Policía de poner en conocimiento de sus jefes toda circunstancia que lo tenga como protagonista?
No son pocos los que se preguntan, además, por qué no instruyó como correspondía al personal interviniente en el choque a comunicar a los padres de los chicos lo que había ocurrido, en resguardo de su integridad.
Y, finalmente, ¿Por qué el comisario González no se sometió, como debería haberlo hecho, a un dosaje de sangre para demostrar que estaba en condiciones de manejar?.
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