Un clásico del verano: Yuyales, abandono y criaderos de alimañas

Mientras desde la Provincia y la Municipalidad lanzan campañas para prevención de las enfermedades transmitidas por los diferentes insectos y roedores que se crían en estos sectores.

Las miradas de los vecinos están puestas, como todos los veranos, en el desempeño del área de Servicios Públicos y Espacios Verdes, en cuanto al desmalezado. Como pasa con otras cuestiones, como la basura, por ejemplo o el cuidado de las veredas, hay responsabilidades que recaen sobre los vecinos.

Mientras se hacen campañas desde Ambiente y Salud para prevención de plagas y alimañas que proliferan en el caso de baldíos con vegetación sin cortar, muchos terrenos privados, a menudo cercados y con cartel de venta parecen verdaderos rincones de selva, en los que ni las máquinas ni los machetes pasaron por meses.

La realidad es que  hay una ordenanza que establece que tanto las veredas como los baldíos privados deben ser mantenidos por sus dueños. De no cumplirse de esta manera los vecinos del lugar en cuestión se ven perjudicados, ya que si ellos mantienen sus veredas y patios en buenas condiciones para evitar la cría de estos insectos y alimañas no sirve de nada si en el terreno colindante está totalmente descuidado.

No es uno ni dos, para poder generar un ambiente mas limpio es necesario que todos los vecinos se ocupen de la poda, el mantenimiento del césped, limpiar y desmalezar sectores sin uso, renovar constantemente los objetos que contienen agua.

En enero de este año la Municipalidad llevó a cabo un programa en el cual se desmalezaban las veredas de los vecinos sin costo. De esta manera se renueva la estética y es el puntapié inicial para que los ciudadanos noten el cambio y puedan mantener sus veredas limpias, sin molestar al vecino.

¿Será necesario que se realice nuevamente para tomar conciencia sobre los inconvenientes que estos hechos generan?

 

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