Durante la mañana del lunes, un impactante choque de vehículos tuvo lugar en la autovía Atilio López; más precisamente a la altura de Villa del Prado.
Por fortuna, y a pesar del fuerte impacto, los protagonistas del siniestro sufrieron lesiones menores que no revistieron riesgo de vida. Así mismo, el accidente reavivó el viejo debate sobre la peligrosidad de ese cruce y la necesidad urgente de mayor seguridad vial.
La polémica radica en los accesos y salidas del sector. Un barrio que ha crecido notablemente en el último tiempo y del que se desprenden loteos como Los Olivares, La Donosa, Villa Mitimay y Santa Teresita.
«Cuando hicieron la autovía, no dejaron retornos y lo que se hizo fue un acceso que es un peligro. Los autos que vienen desde Alta Gracia deben desviar hacia La Donosa y esquivar los vehículos que van hacia Córdoba para meterse y regresar hasta el arco principal y los que vienen hacia la Donosa desde Córdoba, lo mismo. Se meten como vienen y pasan estás cosas», contó Claudio, vecino que vive paralelo a la colectora, en diálogo con RESUMEN.
A pocos metros de ese pase peligroso está la pasarela peatonal, la cuál fue levantada en el año 2015 tras una incansable gestión vecinal para acabar con los siniestros viales ocurrido en esa zona. Si bien la misma contribuyó a la seguridad de aquellos que cruzan a diario por la zona, está no parece haber sido la solución radical al problema de los accidentes.
«A la pasarela la usan pero no es como sucede en Santa Ana, por ejemplo. Allá sí fue una solución porque tiene un solo acceso, el principal. Acá hay dos paradas de colectivo y la pasarela ni siquiera fue construida en cercanías de la escuela para que la usen los chicos. Muchos pensamos que el lugar en donde está no es el más conveniente», agrega el vecino.
La pregunta entonces radica en saber cuál es la solución definitiva al conflicto. ¿Una rotonda?, ¿Semáforos intermitentes?, ¿Señalética?.
El debate está abierto…
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