Los guarda arroyos comenzaron sus actividades a mediados del año pasado, y pronto su accionar se convierte en hábito: un llamado para niños y padres; que consiste en limpiar la vera de arroyo, pasar un buen rato, y generar conciencia – y educar con el ejemplo – del cuidado de nuestro entorno.
A esto se le suma distintas actividades acordes al tema: charlas y vivencias, como escuchar el croar de los sapos o la contemplación de insectos.
En esta ocasión se brindaron charlas sobre las piedras; y sobre nuestros ancestros de los pueblos originarios. En la caminata de ayer participaron la profesora Julia Masciotta y Edu Heredia. De la convocatoria participaron, en total, 80 personas.
Comentarios: