Durante la tarde del jueves, la Justicia determinó «Prisión perpetua», para Dante Tinari, el asesino de Valeria Villarreal.
«En general estamos muy conformes, felices porque era lo que se pedía después de un largo año», afirmó Cristina Anachuri, familiar de la víctima e integrante de MUMALA.
El juicio se llevó adelante a partir del lunes 13 de abril y fue, en general, bastante rápido.
Tinari había sido imputado por «Homicidio agravado por uso de arma y agravado por el vínculo» . Al momento de declarar, afirmó que «no recordaba como había asesinado a su ex pareja».
La defensa buscaba reafirmar la idea de que Tinari actuó bajo emoción violenta, sin embargo no es un atenuante para los casos de femicidio.
«No era yo»
Durante el jucicio, la penúltima en tomar la palabra fue una de las hijas de Valeria que, mirando al Jurado pidió justicia para la abuela de su bebé y reclamó que Tinari no parecía haberse arrepentido.
En ese momento, el acusado se puso de pie y dijo: «Karen, perdoname, no era yo quien lo hizo»
Posesivo y controlador
Anachuri dijo que nunca tuvo contacto directo con Tinari, quien había mantenido una relación de un año y medio aproximadamente con Valeria; sin embargo declaró que el entorno de la víctima lo identificaba como una persona posesiva, dominante, controladora y muy celosa. Además destacan que tenía actitudes de maltrato y menosprecio hacia ella.
«Nos enteramos ahora, y luego de que alguna gente declarara, que los días anteriores al hecho había amenzado a Valeria y realizaba una persecución constante con ella», sostuvo la referente de MUMALA.
El caso
Minutos antes de las 8 de la mañana del 26 de septiembre de 2013, Dante Tinari fue hasta la casa de su ex pareja, Valeria Villarreal y tras mantener un intercambio de palabras con ella la tomó del cabello y la llevó a la calle donde, en presencia de sus hijas le efectuó dos disparos.
Posteriormente se fue del lugar corriendo manchado en sangre y con el arma en la mano y circunstancialmente se encontró con un patrullero que pasaba por el lugar y, creyendo que estab siendo buscado, se disparó en la cara.
Ambos fueron trasladados al hospital local y posteriormente a la ciudad de Córdoba. Villarreal falleció horas más tarde en el Hospital Misericordia y Tinari permaneció unos días internado y posteriormente fue dado de alta y trasladado a la cárcel.
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