En diciembre del 2022 la tragedia se apoderaba del tranquilo barrio privado de Villa Juana, en Alta Gracia. Madre e hijo resultaban gravemente heridos a raíz de una explosión de la casa en la que ambos vivían desde hacía poco tiempo. Dichas lesiones, días mas tarde, provocarían la muerte de Mariana (la mamá) sólo dias mas tarde y, en enero de 2023 y tras largos días de agonía, la de Augusto de apenas 14 años.
La región no salía de la conmoción. Tanto el cuadro de salud de la mujer como también el del adolescente eran críticos desde el momento inicial, por lo que las esperanzas eran prácticamente nulas. Asimismo, con el correr de las horas y mientras se realizaban los peritajes en el lugar para intentar determinar el causante fehaciente del desastre, se supo que esa vivienda había sido habitada hacía poco mas de un mes por lo que la mirada estaba puesta en la conexión de gas.
«Fue una fuga de gas, se estima que cuando el chico prendió la hornalla explotó todo», anticipaban fuentes ligadas a la investigación a RESUMEN en ese entonces. Pero, lo que parecía ser un mero infortunio, podía teñirse de negligencia ya que al tratarse de un inmueble a poco estrenar- ubicado en uno de los sectores mas exclusivos de la ciudad- resultaba extraño pensar que quien o quienes hubieran hecho el trabajo de instalación de gas- como así también eléctrico- hayan sido unos improvisados. En fin..
La fiscalía llevó adelante la investigación correspondiente pero no hubo imputaciones. Dos años después, para algunos el caso sigue teniendo aristas sueltas.
¿Se pudo o no haber evitado?.
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