En la localidad vecina de Santa Ana vive un pequeño de 5 años: Jeremías, que tiene una patología llamada artrogriposis congénita múltiple. El niño no flexiona sus pies ni sus brazos y según expresó Gabriela, su mamá, en diálogo con RESUMEN «sufre caídas y tiene hematomas porque usa sus extremidades como apoyo».
La familia de Jere pidió la silla motorizada a la obra social OSMEDICA pero no obtuvieron la aprobación. «Necesitamos la silla para que él mejore su calidad de vida. El año que viene inicia primer grado y queremos que pueda desarrollarse allí de la mejor manera posible» comentó su mamá.
El pedido: «Queremos que nos escuchen y nos ayuden a conseguir esta silla que tanto necesita Jere. Tiene muchas ganas de vivir pero tenemos que mejorar su calidad de vida».
La silla: Es pediátrica de chasis rígido regular confeccionada a medida. Es motorizada y tiene un joystick que la maneja, además de ruedas reforzadas que no se pinchan para que el niño se desenvuelva en cualquier terreno.
Foto ilustrativa.