En las ultimas horas, la fiscalía de II instrucción de la ciudad, a cargo del dr Alejandro Peralta Ottonello, dictó la prisión preventiva del sujeto de 53 años, oriundo de esta ciudad, quien está imputado de “Abuso sexual con acceso carnal reiterado agravado por el vínculo y corrupción calificada”, cuya víctima es su propia hija.
Éste permaneció prófugo durante dos años. Desde el 2018 para ser mas exactos, cuando la joven (quien tiene hoy 20 años) decidió denunciar los abusos que sufrió por parte de su padre desde que tenía 9 años de edad. Incluso, fruto de esas vejaciones, en 2015 la joven tuvo un hijo.
A principios del mes de noviembre, y tras una intensa pesquisa, el hombre fue detenido en una barrio de la Ciudad de Córdoba.
Los hechos
Todo habría empezado cuando la víctima tenía nueve años y, al principio, con tocamientos. En ese entonces la familia vivía en la ciudad de Córdoba. Con el correr del tiempo llegaron a Alta Gracia y cuando la niña tenía unos 13 años de edad empezaron las violaciones con acceso carnal. Acompañado de esto, las amenazas.
El sujeto había tomado a su propia hija como un objeto sexual. No la dejaba tener amigas, la celaba y para dejarla salir a bailar, antes le decía «¿No hay nada para mi», aludiendo a que antes debía complacer sus perversos deseos sexuales.
La joven mujer, además de sufrir una infancia, una adolescencia sesgada por los abusos de su padre, debió sobrellevar un embarazo que llevaba un secreto incluido, toda vez que su victimario –progenitor-, y a su vez padre del niño que en 2015 llevaba en su vientre. Éste, le obligó y exigió que dijera a sus hermanos y
demás conocidos, que dicho embarazo había sido producto de una relación ocasional.
En 2017 la joven se animó y denunció los hechos. Hoy su padre y abusador está alojado en la cárcel de Bouwer y, por las últimas ordenes de la Justicia, aguardara un juicio que resuelva su situación procesal.
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