Podrían ir a desguace los vehículos secuestrados que no sean retirados a los 6 meses

Está comenzando a tomar forma un proyecto para modificar la ordenanza de subasta de motos  que le aplicaría un nuevo condimento a la normativa: los vehículos secuestrados por ruidos molestos podrían ir a desguace, si a los seis meses no son retirados por su propietario. “Ni si quiera irían a remate, sí a desguace”, afirmó el Secretario General del municipio Roberto Urreta que estaría en los primeros pasos del escrito. “La idea es que no vuelvan a la calle, sino que sean compactados, debido a que hay muchos casos reincidentes”, señaló. El proyecto será presentado en los próximos días, con la intención de que sea aprobado en las primeras sesiones del Concejo Deliberante que comenzará a trabajar nuevamente el 1º de marzo.

Es importante aclarar, en otro orden, que la ordenanza que autoriza el secuestro y multa de los vehículos que emanen ruidos molestos fue aprobada el 20 de diciembre, antes de que el Concejo comenzara su receso; con la intención, seguramente que comenzara a plicarse en temporada estival, momento en que son continuos los excesivos ruidos de caños de escape fuera de lo establecido. Sin embargo, recién “fue publicada en el boletín la semana pasada”, asegura el funcionario, por lo que, si bien se llevaron a cabo diversos operativos (las dos primeras semanas de enero se secuestraron 155 motos por distintas infracciones) los inspectores no podían secuestrar los vehículos por esta razón. Recién a partir de esta semana, se aplicará la flamante normativa que estipula, entre otras cosas, una multa de $2236 para el conductor, mientras que el vehículo (tanto motocicleta, auto, camioneta, etc) será retenido. Además, no se podrá retirar el vehículo sin antes realizar la colocación del caño de escape reglamentario. Para los reincidentes, la multa asciende a $6.708. Por otra parte, se prohíbe a los comercios la venta y/o colocación de caños de escapes no reglamentarios ni homologados.

Si bien este proyecto demoró varias semanas en el legislativo hasta que fue aprobado (debido a que los ediles debieron hacerle  algunos ajustes), cuando tuvo el OK -por unanimidad- la recepción en la calle fue mejor de lo muchos esperaban. Más allá de ésto, recién comenzará a aplicarse a casi dos meses de su aprobación; motivo éste que ya ha generado innumerable cantidad de comentarios y quejas al respecto. No habrá sólo controles por ruidos molestos; esta falta se considerará junto a las demás en los distintos operativos.