Los cinco gremios docentes con representación nacional, los funcionarios del ministerio de Educación y del Consejo Federal en la materia procurarán este miércoles una base de acuerdo salarial para los docentes de todo el país, en el contexto de la paritaria federal que el Gobierno nacional inauguró el 30 de enero y cuyas mesas técnicas comenzaron a trabajar el jueves último en temas pedagógicos y programáticos.
El encuentro en el Palacio Sarmiento entre el ministro de Educación, Nicolás Trotta y su viceministra Adriana Puiggrós -además de otros funcionarios- y los referentes sindicales de las cinco organizaciones gremiales nacionales está previsto para este miércoles a partir de las 16.
Con el objetivo de alcanzar un acuerdo que garantice el inicio del ciclo lectivo -salpicado por graves conflictos durante los últimos años-, estarán sentados a la mesa representantes de la Confederación de Trabajadores de la Educación (Ctera) -el gremio nacional más numeroso del sector-, la Unión Docentes Argentinos (UDA), la Confederación de Educadores Argentinos (CEA), el Sindicato Argentino de Docentes Privados (Sadop) y la Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica (AMET).
Luego de que el pasado jueves los gremios participarán de una comisión técnica pedagógica, las negociaciones pasarán ahora a abarcar los aumentos salariales correspondientes a este año.
De esta manera, funcionarios y dirigentes gremiales procurarán alcanzar un acuerdo de recomposición de los salarios docentes de todo el país que, luego, cada jurisdicción podrá acatar o mejorar, según el tenor de la negociación y las posibilidades presupuestarias de cada provincia.
Días atrás, Trotta declaró que «el salario inicial de referencia tiene que tener una mejora, en el marco de ser conscientes de que Argentina vive una etapa muy compleja».
«El Gobierno debe buscar equilibrio en las distintas respuestas en este momento para superar la crisis, con una mirada de recuperación económica y social de la Argentina; y, creo, que esta realidad la entienden todos los actores del sector educativo«, evaluó el titular de la cartera de Educación.
Asimismo, consideró que «es importante que suban los salarios docentes pero también lo es romper la inercia inflacionaria que dejó el Gobierno de Mauricio Macri, porque en 2019 tuvimos la inflación más alta en tres décadas».
Del lado de los gremios, Sergio Romero, titular de la UDA, explicó a Télam la importancia de producir un acuerdo salarial a partir de «la situación de 250 mil trabajadores, que perciben una remuneración por debajo de la línea de pobreza», por lo que exhortó a generar «políticas de ingresos realistas».
«Se impone un acuerdo respecto del necesario cumplimiento de la Ley de Financiamiento Educativo y de la inversión del 6 por ciento del PBI en el área; del sostenimiento del actual régimen previsional docente y del Programa 2020, además de una formación que efectivice a la Comisión de Interpretación Normativa«, señaló.
Por su parte, el secretario gremial de Ctera, Eduardo López, dijo que en la reunión de mañana “vamos a pedir ganarle a la inflación” y puntualmente se solicitará la «actualización del Fondo Nacional de Incentivo Docente que está congelado hace tres años”.
Fuentes gremiales consultadas por Télam resaltaron que, más allá de la importancia de las condiciones laborales, la carrera docente y la formación profesional, la condición prioritaria para el acuerdo es la recomposición salarial ante la realidad de pobreza e inflación.
La paritaria docente nacional, que el macrismo había derogado a través del ex ministro de Educación, Esteban Bullrich, fue reactivada por decisión del gobierno de Alberto Fernández e inaugurada el 30 de enero.
La paritaria, derogada por el gobierno macrista casi inmediatamente luego de asumir en diciembre de 2015, había también excluido a la representación del Sadop por considerarlo ajeno a la discusión con el Estado.