Martín y Flavia trabajaban todos los días. Él pasabas horas y horas de operario en Avon y ella de encargada en una oficina postal. Un día, ambos cansados de una vida supuestamente normal, saltaron al vacío y comenzaron un viaje que pretende unir en moto Ushuaia con Alaska. Todo el continente americano bajo sus pies. “Renunciar y salir al mundo fue un sueño que siempre anhelé. Sólo un sueño hasta que me animé a perseguirlo”, cuenta él desde las redes sociales donde cientos y cientos siguen los pasos de lo que llaman “Una aventura sobre ruedas”.
Hace pocos días, estos valientes cazadores de sueños estuvieron en Anisacate, compartieron momentos con los artesanos y hasta vendieron artesanías en la feria de Villa La Bolsa.
Los chicos son de Grand Bourg, una ciudad del partido de Malvinas Argentinas, provincia de Buenos Aires. Desde ahí salieron el 22 de mayo del 2017 y ya llevan 10.000Kms recorridos. No tienen apuro, por eso se permitieron primero ir a Brasil, después estuvieron tres meses en Iguazú y ahora sí, están yendo a Tierra del Fuego para arrancar desde el extremos sur del continente.
Martín no es la primera vez que viaja en moto. Hace unos años, en el trabajo le dijeron: “en dos meses tenés vacaciones” y, como no tenía mucho dinero pero sí una moto 150cc, se puso el casco y se fue a Bariloche, cruzó a Chile e hizo en algunos días 5.000km. “Ahí se despertó mi pasión por las motos y al año siguiente hice otro mucho más largo: Chile, Machu Picchu y Bolivia, un total de 7.000km en 8 días. Al año siguiente hice Bs As, Iguazú, Camboriú y volví por misiones. Y el último viaje lo hice con mi mamá con 61 pirulos en 2016, se había re bajoneado así que la invité a Bariloche y nos fuimos”, cuenta a Resumen en su visita al Valle de Paravachasca, donde no le esquivó al circuito histórico de Alta Gracia.Después de trabajar seis años, Martín habló con su supervisor y arregló su salida. Con eso se compró la moto de sus sueños pero se quedó sin dinero. “Empezamos a hacer artesanías, también a sacar fotos, videos y bueno con lo que surja vamos haciendo el mango”, explica. Ya en su estadía por esta zona, los motoqueros estuvieron en Anisacate, en la casa de César, un artesano con el que compartieron cinco días. Junto a él aprovecharon el fin de semana turístico y fueron a vender a la feria de La Bolsa.
“Lo más importante que uno encuentra viajando es la gente. Los paisajes nos nutre la vista pero es la gente la que nutre el alma”, cuentan en este viaje que planean de 5 años y que tiene en cuenta más las vivencias que los kilómetros. A los chicos les gusta transitar, y a eso de las 16 hs hacen sociales con los vecinos de cada lugar, donde piden permiso para “hacer la noche en la carpa”. También los convocan personas desde las redes sociales. Eso pasó con César, “un luchador de la vida que nos dio todo lo que tenía a disposición para que podamos seguir cumpliendo nuestro sueño”, como ellos dicen sobre su amigo de Anisacate. Con él lograron recaudar “casi el 70% del dinero que necesitamos en combustible para llegar a Ushuaia”, festejan en las redes sociales una vez terminada su travesía por el Valle de Paravachasca, lo que les dio un empujoncito a estos aventureros que no sólo están cumpliendo su sueño, sino también el de muchos que, tal vez, se animen algún día y se lancen a las rutas.
INSTAGRAM:
unaaventurasobreruedasoficial
YOUTUBE:
MartinLeones
Comentarios: