El día siguiente de los inexplicables dichos de Carrió sobre José Manuel De la Sota sólo sirvieron para profundizar el rechazo que llegó desde todos los sectores de la política argentina. En la mañana del miércoles, el propio Ramón Mestre, candidato a Gobernador por la Unión Cívica Radical calificó el hecho como “un hito lamentable en la historia de las campañas políticas de Córdoba porque una dirigente nacional vino a hacer un papelón”.
“No queremos más ´Herminios Iglesias´ quemando cajones ni ´Luises Barrionuevo´ quemando urnas. Esto ya pasó”, señaló el Intendente capitalino en diálogo con Buenos Días América que se emite por América TV.
Las referencias estuvieron dirigidas al tristemente célebre episodio del cierre de campaña del peronismo bonaerense en 1983, cuando Herminio Iglesias(entonces candidato del PJ a la gobernación) quemó un ataúd con el escudo de la UCR en pleno acto, lo que terminó hundiendo al peronismo en una elección que hasta el momento se presentaba mucho más pareja que lo terminó indicando el resultado final. El segundo ejemplo, que personifica en Luis Barrionuevo, recuerda la destrucción de urnas que promovió el dirigente gastronómico en 2003 en Catamarca para impedir las elecciones.
Mestre, además, les pidió públicamente a Carrió y a «los dirigentes de Buenos Aires que apoyan a Negri» , directamente, que “abandonen Córdoba”. “Nos avergüenzan. No queremos que ningún dirigente venga a reirse de nuestra historia. Los dirigentes de Cambiemos nacional que están en Buenos Aires que quieren venir a Córdoba tienen mucho que resolver en Buenos Aires y en el país” dijo el intendente claramente ofuscado.