Lucas Piñero tiene 14 años. Su historia comenzó a hacerse viral cuando, el día de Navidad, una usuaria de Facebook lo conoció y publicó una foto de él en el puesto de tortas fritas de su familia. Él es un chico normal, va la escuela como todos los otros chicos de su edad, pero a diferencia de ellos, trabaja todos los días para ayudar a mantener a su familia. Se ubica en la orilla de la ruta Alta Gracia-Carlos Paz todos los días bajo un árbol vendiendo tortas fritas, pan dulce, pan casero, salame y queso. No importa el calor que haga en estos días de verano, Lucas está allí, con una sombrilla para hacer sombra, hasta que se acaben las tortas fritas y su papá los pase a buscar a él y su hermano mayor.
Luquitas (como le dicen) vive en barrio Parque Virrey con su mamá, papá y cinco de sus siete hermanos. Su familia vino de Misiones hace poco más de un año con la esperanza de encontrar trabajo, pero actualmente, el puesto de tortas fritas es el único ingreso que tienen: “Mi papá tiene aplastadas dos vértebras de la columna y no puede hacer fuerza, así que hacemos ésto. Cayó de un camión de vino mientras trabajaba”, explica. Su hermano más chico tiene 2 años, y tiene dos hermanas de 7 y 8 años que ayudan también a la economía del hogar vendiendo en el barrio el pan que hace su mamá y juntando leña. “Mi mamá trabaja en mi casa -nos cuenta-. Ella hace pan dulce para traer acá y tengo mi hermana que también sale a vender por el barrio con un carrito de pan. Y yo también salgo a vender de vez en cuando”. Durante el ciclo lectivo, Luquitas trabaja sólo los fines de semana, pero ahora que terminaron las clases, se encuentra en su puesto todos los días de 8 a 20 hs, es decir, durante doce horas. “No somos ricos -dice- pero estamos laburando para salir adelante”.
Si le preguntás qué siente al poder ayudar a su familia, te responde con un simple: “me siento bien, porque se siente bien ayudar a la familia”. En caso de querer pasar por el puesto de Lucas, ayudarlo y conocer más de su historia, se lo puede encontrar a la salida de Alta Gracia, camino a Carlos Paz, por la ruta C45 a mano derecha, a metros de la rotonda de Villa Camiares.
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