Sucedió alrededor de las 13:30 hs de este martes en la intersección de calle Ituzaingó y Reconquista de barrio Cafferata. Un joven de 16 años y una niña de 13 fueron interceptados por dos motochorros, quienes exhibieron un cuchillo para lograr su objetivo. A pesar del grave momento, ambos muchachos corrieron y pudieron escapar de quienes siguieron su marcha en sentido de la Av. del Libertador.
A metros de lo sucedido, la joven -quien estaba con una importante crisis nerviosa- pidió ayuda a una persona que pasaba por el lugar, quien se encargó de hablar con la madre y acompañarla hasta su casa que queda a pocas cuadras de allí. “Volvíamos del Polideportivo, mi amigo quiso acompañarme para que no me venga sola. Veníamos charlando cuando vemos estos tipos que le dicen a mi amigo que le diera todo y él trataba de explicarles que no tenía nada. Yo salí corriendo, ellos quisieron perseguirme a mi pero después frenaron y fueron para el lado donde había escapado mi amigo”, señaló la muchacha a este medio, aún llorando por lo ocurrido.
Si bien la crisis nerviosa se debía al terrible momento pasado a plena luz del día y en un sector donde transita mucha gente a diario, tuvo que ver también a que desconocía la suerte de su acompañante ya que ambos corrieron para lugares opuestos. A los pocos minutos, el joven se comunicó con la muchacha para contarle que estaba bien, y que también había logrado escapar.
Testigos de lo ocurrido manifestaron que los motochorros tenían los cascos puestos (uno de color blanco y negro, y el otro color rojo), uno de ellos llevaba una mochila negra y se conducían en una motocicleta de 110 cc. Preocupa el hecho de que este tipo de delitos se haya convertido en una constante en distintas zonas de la ciudad. Los motochorros escogen a sus víctimas (normalmente adolescentes o personas mayores) y van armados. Es cuestión de segundos. Exhiben el arma, piden dinero o celulares, y huyen a gran velocidad.
Comentarios: