Iván Poletta encabeza las Secretarías de Servicios Públicos e Infraestructura y, hace unas semanas atrás, estuvo en el ojo de la tormenta por el escándalo de los perfiles falsos. En diálogo con RESUMEN, el funcionario, uno de lo más cercanos al Intendente Torres, habla de ese y otros temas vinculados al desempeño del radicalismo.
Luego del pedido de renuncia, siguieron las observaciones sobre su función en el Concejo, acerca del manejo de la información y una devolución de la colocación de luminarias, las viejas y las nuevas anunciadas…
La verdad, me sorprende. Nosotros no tenemos que hacer devoluciones, y nadie se acercó a la Secretaría para consultarme acerca de estos datos. Llevamos más de 700 luces en un año. Ahora tenemos una apuesta muy fuerte, que son las luces de led, que se van a colocar principalmente en a los accesos a la ciudad y las zonas más céntricas y estamos viendo si adquirir unas 500 más.
Usted dice que no hacen devolución. Sin embargo, hay una cierta sobreexposición a través de las redes sociales de su trabajo, casi a diario. ¿No es una contradicción?
No, en absoluto. La gestión se debe a los vecinos y lo que hacemos a través de las redes sociales no tiene fines políticos, sino que tiene el objetivo que el vecino común pueda ver lo que venimos haciendo, en los distintos sectores, con el dinero que se recauda con los impuestos; en mi caso, con la Secretaría de Infraestructura y la de Servicios Públicos. El termómetro social y la respuesta de los usuarios, me sugirió que mostrar lo que los empleados hacen, puede ser una apuesta muy alta, pero sirve.
Sin embargo, hay otros canales para hacer reclamos: Vecino Digital y Atención al Vecino. La sensación es que corren detrás las críticas puntuales.
No. En una ciudad donde constantemente se generan necesidades y pedidos, es una cuestión lógica. Mostrar a través de las redes lo que se lleva adelante activa un mecanismo, provoca que mucha gente que antes veía que la ciudad estaba más inactiva, o por lo menos no con la frecuencia y celeridad con la que venimos hoy, empiece a animarse y a hacernos llegar su reclamo puntual. Yo no los tomo como reclamo, son pedidos que buscar captar la atención del funcionario para buscar soluciones.
¿Usted siempre manejó su perfil de Facebook?
Yo tengo un perfil personal que no tiene mucha actividad porque no mezclo lo familiar con el trabajo. A parte, tengo otro institucional, que en un su momento no fue creado por mí, pero que en un 98% lo manejé y lo manejo yo.
¿Qué lo vincula a Tamborenea, el ex contratado municipal ligado a los perfiles falsos del escándalo?
Nada. Mejor dicho, la oposición me vincula a él, tanto a mí como a Cristina Roca. Aunque ahora se están queriendo despegar del tema, como si nada hubiera pasado. Nosotros no podemos responder de lo que hace un empleado municipal, en su fuero íntimo, dentro de su hogar, vaya a saber a qué hora. Siempre que tuve que decir las cosas, lo hice de una forma enérgica y directa, recordarán el Concejo: nunca me he manejado detrás de ningún perfil. No es mi forma.
Pero las acusaciones fueron graves, más a nivel político que judicial…
Son nimiedades. Los radicales se dedican a nimiedades y el poco trabajo que hacen, es en contra. Por ejemplo recientemente en una reunión de vecinos, nos enteramos que Morer sugirió a un vecino que se comprara dos fuegos de luces “porqué la Municipalidad no tenía”, cuando nosotros más que nunca, nos dedicamos a atender estas cuestiones. Algo que me pareció muy bajo, más allá de la tristeza de un vecino de pocos recursos que tuvo que gastar dinero, bajo la sugerencia de una concejal que gana más de 40 mil pesos.
Usted dice que la UCR debería apoyar y acompañar. Hace pocos días atrás, los 4 concejales afirmaron la intención de votar a favor del convenio de las luces de Led, siempre y cuando se les presentara la información requerida.
Estoy muy acostumbrado al accionar de la UCR porque es el mismo concejo que me tocó llevar adelante en la gestión anterior. Eso de decir “Vamos a acompañar” siempre viene con un pero, una condición. Por cada cosa, por demás beneficiosa, que planteamos para Alta Gracia, al no poderse oponerse en forma directa, ponen ese “pero”, que atrasa a las decisiones y las realizaciones. Es por eso que ya abandonamos esa carrera por obstáculos en la que el radicalismo pone constantemente palos en la rueda.
Los concejales UCR afirman que tienen el derecho y el deber de controlar la gestión de Unión por Córdoba.
Me parece muy bien, pero tienen que darse cuenta que están ahí por el voto de una fracción del pueblo. Nosotros seguimos avanzando y ellos deberían ponerse codo a codo con esto, sería una forma de devolverle algo a la ciudadanía por los sueldos que ganan. Demorar, judicializar absolutamente todo, hasta perfiles de Facebook y poner palos en las ruedas no es, para mí, cumplir con su rol.
No se limitaron a judicializar, porque pidieron su renuncia…
Morer pide la renuncia, tanto mía como la de Cristina Roca, cuando él debería estar avergonzado por haber sido el Secretario de Gobierno, de un intendente declarado culpable de corrupción: caso único en la ciudad. Morer debería renunciar por haber sido una pieza fundamental de Bonfigli. Y no sólo él. De la misma forma que los radicales exigieron la renuncia de dos funcionarios, ahora los que deberían dar un paso al costado son los ellos, ya que fueron parte de un gobierno que dejó en vergüenza a la ciudad y a la clase política, en todo el país.
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