Mediciones, algo de ruido y muy pocas nueces

Falta un año para las elecciones municipales. No hay definiciones ni candidatos firmes entre los partidos (o coaliciones) mayoritarios. Sólo hay dos certezas: no serán ni Facundo Torres ni Mario Bonfigli.

El actual Intendente no puede repetir luego de haber gobernado la ciudad en dos mandatos consecutivos; uno como viceintendente a cargo, luego que Walter Saieg fuera Ministro de Gobierno de la Provincia y el otro, como Intendente electo, a partir de 2015. Para postularse, debería ser necesaria una modificación de la Carta Orgánica. El creciente posicionamiento de Torres en Córdoba descartaría que esa posibilidad se encuentre, si quiera, en el tintero, por ahora.

En cuanto al ex Intendente radical, lo imposibilita una medida legal; en 2017 recibió una condena por corrupción que incluye la inhabilitación para ejercer cargos públicos por tres años. Por más que la sentencia no sea firme, y todo pueda pasar, Bonfigli, con un imagen aún altísima, no es un candidato “cómodo” para Cambiemos. Si es que existen, a 12 meses de las elecciones, figuras que puedan definirse “cómodas” para todo el arco de la coalición opositora.

La lógica común, tanto de Unión por Córdoba, así como de Cambiemos es simple: el que más mide, va; ecuación razonable pero no suficiente. Todos los candidatos tienen un techo, por más que sean los que más intención de voto tienen. Esa brecha que les sirve para lograr una mayoría de votos suficiente, hay que complementarla, negociando o enamorando. En el caso de UPC la cosa debería ser más simple. Encontrar una fórmula que pueda nuclear las dos líneas del peronismo oficialista y lograr así el entusiasmo de toda la militancia. Si, como se rumorea, el que más elevada imagen tiene es Marcos Torres, hermano del Intendente, debería encontrarse a un saieguista que lo acompañe. Nombres no faltan: Fernando Mina, Secretario de Desarrollo y Salud, por ejemplo. O Juan Manuel Saieg, actual viceintendente; quien, según los dichos vertidos durante las últimas semanas no tendría intención de repetir su actual cargo y menos aceptar la lógica de las mediciones. Eso si hubiese dos líneas, nada más.

Sin embargo, desde hace unos meses habría aparecido una tercera, desvinculada, pero no tanto, de ambos frentes: Pedro Spinetti y Roberto Urreta. El primero dejó su cargo en el Instituto Manuel de Falla, para dedicarse más a su otra pasión, la política. En cuanto a Urreta, su vuelta mediática al Concejo deja entrever cada vez más sus ambiciones.

Y, si de recinto legislativo se habla, llamó mucho la atención la vehemencia de las palabras de Cristina Roca, aplaudidas por sus compañeros al compás de “Tenemos candidata”.

Claro está, todas esas posibilidades no toman en cuenta otra variable; o “la” variable: ¿Y si Walter Saieg tiene intenciones de postularse para el Sillón de Lepri? Para eso hay que esperar a las elecciones provinciales y la nómina de los Legisladores, tanto Departamentales, como Provinciales. Por el momento parecería que el Legislador Saieg sigue muy atento y vinculado en el Departamento Santa María, cuidando de cerca sus bastiones, que están siendo tanteados (y timbreados), con un trabajo de hormiga, por un optimista Ignacio Sala, Presidente Departamental del Pro. No será éste el único que apunta a postularse para la unicameral, el próximo otoño. Claudia Cuffa también está trabajando en ese sentido y se rumorea que Roberto Brunengo no descarta esa posibilidad. Esa hipótesis explicaría por qué el Concejal de la UCR descartó que el próximo intendente salga del recinto legislativo. Quiso acorralar a Leandro Morer y, a la vez, ubicarse en otro abanico de posibilidades.

Quien, por otra parte arrancó a usar al Concejo como plataforma electoral unipersonal, es justamente Morer, decidido en ser el candidato de Cambiemos, sí o sí. Sin duda, hasta hoy, el que más mide pero necesita convencer, ya que enamorar no es posible, a algunos de los socios de Cambiemos. Por ahora, parecería más cerca del Pro, que trabaja en lanzar además a Osvaldo Coloccini, que de sus correligionarios. Quien algo más de consenso tiene, es la Legisladora Amalia Vagni, uno de los nombres que más suena en los últimos meses, aunque desde la casa radical afirman, una y otra vez, tener otros ases en la manga. ¿Será cierto?

Falta mucho, y por sobre todo faltan las elecciones provinciales. Y, en el medio, un país en una difícil situación. Todo lo que escribimos puede pasar; y también nada de todo esto. Por ahora algo de ruidos y muy pocas nueces.

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