La violenta escena ocurrió delante de la gente mientras se desarrollaba una peña en el balneario de Anisacate este fin de semana.
Fuentes judiciales advirtieron que la madre de la criatura le pegó brutalmente en reiteradas oportunidades, y luego intervino el padre que procedió de la misma manera.
Al ver la escena, la gran cantidad de testigos de lo ocurrido se dirdieron aviso a la Policía, quienes al tomar intervención notaron que ambos estaban bajo los efectos del alcohol; y para sorpresa de los uniformados, pudieron comprobar que el padre también es policía en actividad.
Los agresores fueron identificados como Paola Correa y el agente Pablo Ureta quienes quedaron detenidos por algunas horas por «Contravención» y posteriormente recuperaron la libertad. La niña, por su parte, fue entregada a una de sus abuelas.
Luego de lo ocurrido tomó conocimiento el Tribunal de Conducta Policial quienes hicieron retirar el arma reglamentaria al policía.
Foto ilustrativa
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