Destacó que tuvo muchas oportunidades de mudarse y vivir en otro lugar: «Deseché muchas oportunidades de mudarme y me quedé aquí. Vivía un tiempo en otro sitio y luego terminaba volviendo. Soy feliz caminando por las calles de Alta Gracia».
Estrellas blancas
Farías afirma que no hubo un antes y un después de su paso por las «Estrellas Blancas»-equipo del Club General Paz Juniors, emblema del básquet a nivel nacional en la década de los `60- sino que reconoce que tuvo excelentes compañeros y jugadores: «He compartido con ellos muchos años y han sido importantes también». «¿Por qué sobresalen más unos que otros? Porque están tocados con una varita mágica. A mi nadie me enseñó a jugar al básquet, me guiaron, pero había algo natural, que venía de la cuna» relató.
«Tuve un trampolín fácil, ya que desde muy jovencito comencé a militar en divisiones de mayores de Córdoba, el paso mío por General Paz Juniors, estoy muy contento de haber vivido esos tiempos» manifestó contento.
Sus comienzos: Sporting Club
El basquetbolista nació un 23 de marzo de 1941, en La Boca, Buenos Aires y dos años después, su familia regresó a Alta Gracia, de donde su padre era oriundo. Cuando tenía once años, se mudan justamente, a pasos del Club Sporting de barrio Sur. «Hasta ese entonces, no había conocido una cancha de básquet, era chico, tenía la inquietud de meterme en el club y ahí nació el amor por la pelota. Empecé con una de trapo, con una de tenis (risas) para ir aprendiendo el deporte que tanto amo y que tantas satisfacciones me dio».
El básquet en Alta Gracia
La ciudad, como San Francisco y Río Tercero, contaba con una Asociación de Básquet propia que incluía unos seis equipos. Las canchas eran al aire libre y el piso era de cemento o mosaico. «Iba muchísima gente a ver los torneos, a donde fueran (…) Había excelentes jugadores a nivel local: Moreschi, Nuñez, González, Fernández, Gervasi, Heredia».
Marcelo Milanesio
El papá de Marcelo Milanesio, «Un gringo de Hernando que me quiere mucho, viene un día a visitarme y trae un bebé de meses. Me dice: `¿adiviná como se llama? Marcelo por vos y Gustavo por Gustavo Chazarreta(también figura de las Estrellas Blancas). Siempre hemos mantenido una relación excelente con Marcelo Milanesio, hemos estado en contacto y compartido cumpleaños. Es una `mochila´de alegría, el nivel al que llegó y que lleve mi nombre, no me cabe en el pecho el orgullo que siento» narró feliz.