«Su pasión era la moto. Recuerdo que cuando su papá se la regaló tenía cinco años y al principio no se le animaba. Era una moto pequeña de competición. Hasta que un día la agarró y no la soltó más. Era un genio arriba de la moto«, recuerda Mónica, tía de Lautaro Lavenia, el joven que tragicamente perdió la vida a consecuencia de las graves lesiones que sufrió tras protagonizar un accidente de tránsito en Ruta 5.

A los trece años, Lautaro ya había obtenido el Título Provincial en Motocross. Una práctica que se había vuelto una forma de vida y que fue heredada por su padre y por su abuelo. «Mi papá era corredor de motos, él ya tiene 75 años y después siguió mi hermano que es el papá de Lautaro. Fue algo heredado«, expresa Mónica hija de Jorge «El Gringo» Lavenia, deportista reconocido en el ambiente del motocross.

Con múltiples trofeos y competencias ganadas a nivel país, Lautaro recorrió mucho a dos ruedas a pesar de su corta vida y, para ello, su familia fue fundamental. «Mi hermano vivía para él. Lo llevaba a todos los circuitos habidos y por haber, y a todas las carreras. Hasta a Bariloche viajaron«, afirma la mujer conmovida por la reciente tragedia.

Este casi hijo único, decimos casi porque Lautaro tenía dos hermanos por parte de padre con quienes tenía una amplia diferencia de edad, era generoso, solidario y alegre. Además, era un genio del motocross quien no pudo con la última carrera pero que dejó una huella imborrable en la ciudad.

Recuerdo del 2018, Lautaro en la 1º del MX Cordobés