Con el apoyo de ONGs presentes en el recinto como Fundación Natura o las voluntarias de ADMA, que entregaron presentes a los concejales por la ordenanza, aprobada por unanimidad.
«No podemos más que ponernos contentos. Quienes ejercemos el rol de oposición, no fijamos políticas al Departamento Ejecutivo, pero si podemos aportar proyectos como este. Están presentes la gente de Adma y Fundación Natura, el ambiente y el cuidado de las mascotas, pero esto va más allá, va destinado a prevenir daños y lesiones en la salud humana, lesiones en manos, en oídos, en la vista. Somos concientes que la prohibición clandestiniza, por eso somos creyentes de la concientización en este tipo de temas», señaló Roberto Brunengo, autor de la Ordenanza que tuvo retoques desde el oficialismo.
«Una buena ordenanza en un mal momento puede ser una mala ordenanza, por eso le prometí a Roberto que esto iba a salir cuando ya no hubiese comerciantes con stock de pirotecnia, como habia en diciembre pasado», señaló Iván Poletta, presidente del Concejo.
Con la camiseta puesta
Las voluntarias de Adma obsequiaron a los concejales la remera de la institución, de color muy similar al usado por el gobernador De la Sota en su campaña presidencial, lo que motivó las chanzas de peronistas a los radicales que se colocaban la indumentaria: «son los colores de la gloriosa Franja Morada», respondió un pletórico Brunengo, feliz con la aprobación de su ordenanza.
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