Una familia fue evacuada por personal de Defensa Civil durante la mañana de este miércoles, luego de que la vivienda en la que habitan corriera peligro de hundimiento. Las personas afectadas fueron invitadas a trasladarse hasta la casa de familiares.
La casa en peligro se ubica en Av. Hipólito Yrigoyen al 1695 a pocas cuadras de la rotonda Fangio. RESUMEN pudo entrar a la vivienda y conversar con la familia de Marcela Giménez. “Acá vivimos ocho personas, con dos niños chicos y dos adolescentes. La casa venía teniendo problemas y los fuimos arreglando como pudimos. Se hacían grietas y íbamos haciendo llaves, pero siempre fueron apenitas, una grietas chiquitas. Una vez nos dimos cuentas que había un pozo debajo del baño, lo rellenamos, le hicimos una malla y pensábamos que era eso el tema. Pero a las dos semanas, de repente la casa se hizo un pozo y se empezó a abrirse la casa, a caerse pedazos”. Personal de la Municipalidad, en conjunto con Defensa Civil, se acercó al lugar para observar la naturaleza de los daños y alertó a la familia sobre la urgencia de abandonar la vivienda y dió algunas indicaciones acerca de cómo apuntalar la estructura. Marcela, así como su hijo, dudan de que el problema se limite a la vivienda de ellos, edificación en la que viven desde hace más de 30 años.
La cuadra
“Hace años atrás, cuando asfaltaron la cuadra, se dieron cuenta de que había un pozo en la calle. Nosotros tirábamos piedras y se sentía el ruido del agua. Así mismo, lo taparon así nomás, y le pusieron asfalto arriba. Todas las veces que pasa un camión, tiembla todo”, explican.
Con el mismo planteo se acercaron vecinos de la cuadra, que nos mostraron la carpeta asfáltica hundida y nos acompañaron a un recorrido por las viviendas aledañas, indicándonos distintas grietas y rajaduras, tanto en las paredes así como en el piso. En algún punto, se muestra como las paredes se fueron corriendo de algunos milímetros. Todos los vecinos consultados, hacen hincapié en los “cimbronazos” que se producen cada vez que pasa un camión.
Afligida, con lágrimas en los ojos, Marcela explica: “Tenemos que irnos, nos dijeron. Debemos encontrar la forma de apuntalar la estructura y arreglarla. Nos dijeron que por ser un tema privado, la única ayuda que podemos pedir es a través de Desarrollo Social. Pero más allá que queremos volver a vivir en nuestra casa, lo más pronto que se pueda, estamos preocupados. Porqué si no sabemos con exactitud cuál es el problema, aun consiguiendo la plata para poder arreglar todo, ¿quién nos dice que en un año no vamos a estar en la misma situación? o que lo mismo le pase a otro vecino?”.
Cómo seguir
La familia, por estas horas, está tratando de resolver la situación de emergencia como puede, a través de medios propios, sin la seguridad de saber con exactitud cuál es la falla o el inconveniente que produjo este hecho, por demás peligroso y preocupante.
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