En esta ocasión, la cooperadora decidió renovar la mapoteca con la adquisición de diez nuevos mapas.
También se compraron más pelotas para que los estudiantes puedan realizar las actividades de educación física respetando los protocolos sanitarios.
Las compras se llevaron a cabo con el aporte de toda la comunidad escolar. «Gracias al aporte de los padres, sin ellos no se podría hacer todo ésto» afirmó Roberto Ares, presidente de la entidad.
En marzo, realizaron la compra de elementos de higiene para poder volver a las aulas con todas las medidas de seguridad necesarias.
“El año pasado, unos días antes de comenzar la pandemia equipamos los baños con dispensadores de pared de jabón líquido, alcohol en gel y reparamos y pintamos los baños y algunas aulas. Además, compramos 120 tubos LED que todavía no fueron colocados porque nos tiene que enviar un electricista la municipalidad”. Ares narró también que en marzo del 2020, compraron pintura y pintaron el playón de la escuela, dibujaron juegos en el piso del mismo, pusieron redes a los arcos y cambiaron los vidrios rotos: “No pudimos hacer más por la pandemia” explicó.
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