José Heredia, el sodero autodidacta, sólo había llegado hasta quinto grado, pero se apasionó por la arqueología. Después de investigar y estudiar, halló durante varias décadas más de cuatro mil piezas de valor arqueológico en Córdoba. Su hijo Eduardo Heredia, entregó las piezas en mano de la Municipalidad de Alta Gracia en 2013. La actual Coordinadora del Área de Educación y Presidenta del Consejo de la Niñez y, en aquel entonces Secretaría de Educación y Extensión Cultural, Ana Caturelli nos explica la naturaleza de la colección y lo que está planificado para el futuro.
¿Se trata de una donación o hay otra figura legal?
No, no es una donación. Ese es un concepto errado. No se puede donar aquello que no te pertenece. En el caso de la colección arqueológicas hay leyes nacionales y provinciales que dicen muy claramente que todo vestigio, en este caso arqueológico o histórico no pertencen a nadie, ni aunque esté en el terreno de tu casa. Son propiedad del Estado, provincial y nacional. La figura legal es entrega voluntaria de la colección completa, que reunió su papá y que él tenía muy bien conservada en su casa.
¿Por qué esta enorme colección seguía en manos de un privado?
Porque antes eso no era así. Antes la gente participaba de excursiones arqueológicas con arqueólogos profesionales, buscaban o recolectaban en el terreno y coleccionaban. Sin embargo, pasado el tiempo se legisla sobre eso, tanto que ahora no se puede tener nada y hay, inclusive, casos de algunas colecciones que se judicializaron. En este caso fue todo lo contrario.
¿Cómo llegó entonces a la Municipalidad?
Desde el día que asumí como Secretaria de Educación y Cultura se me acercó Eduardo Heredia para decirme que desde hace años quería que se lo recibiera para hablar de la colección de su padre. Sabía que yo era licenciada en Historia y que entonces lo escucharía. Quería cumplir la voluntad de su padre y que esto fuera parte de la ciudad.
¿Lo que marcó el momento no fue un cuestión legal, mas bien, podríamos decir, una coyuntura política?
En otras ocasiones no se lo había escuchado.Cuando vi las estatuillas en el sobre del papel madera no lo podía creer, que en nuestra región hubiese semejantes objetos de arte.
¿ Y cómo fue el proceso de recuperación?
Fue casi un año de trabajo en secreto en conjunto con la Agencia Córdoba Cultura y Patrimonio para ver qué podíamos hacer desde acá para que no se la llevara la Provincia. Desde el mismo momento que las autoridades toman conocimiento de la existencia de una colección de 4000 piezas, tienen la obligación de enviar a Policía Ambiental y llevarsela. Nosotros informamos que íbamos a recibirla y conservarla en la casa de la Cultura. La provincia aceptó y adecuamos la habitación para recibirla. Al poco tiempo empezó Alejandra Funes licenciada en Historia y arqueología, prestada por la Provincia a trabajar y nosotros como Municipalidad becamos a tres chicas para el trabajo de catalogación, clasificación e inventario.
Eso en 2013 y 2014. ¿Cómo siguió después? se pudo avanzar?
En 2015 se hizo el guión Museológico, Museográfico que lo hizo Myriam Baigorria y ya tenemos todo listo. Nosotros pedimos la colección en comodato y lo entregan en forma más estable cuando se arme y se establezca en un lugar. La prioridad es trabajar para podernos quedar con la colección en Alta Gracia.
¿Hay un lugar definido? hace unos meses atrás el Intendente sugirió la posibilidad del edificio que ocupa hoy la Policía en la calle España.
Es una posibilidad. Sin embargo hemos firmado una carta intención, sin valor legal, entre la Parroquia, el Municipio y la Provincia para que su lugar sea en el Obraje o donde fue la Biblioteca Sarmiento.
Es un lugar natural porque en esa área estaría lo prehispánico la presencia negra y el legado jesuítico. No sería entonces un Museo más, parte de un circuito.
¿Sería un Museo Municipal o un Museo provincial radicado en la ciudad?
La idea es que sea una colección municipal si logramos el comodato, pero también tenemos que articular con la propuesta de la Parroquia. Es más la Provincia aclaró que si logramos hacer un buen Museo podría entregarnos las colecciones de la zona que en este momento están judicializadas y bajo su custodia. Los tiempos son lentos. Otra posibilidad es alquilar un espacio
¿Hay alguna forma de que la gente acceda a la brevedad a parte de las piezas?
En marzo-abril en la casa de la Cultura habrá una muestra para presentar la colección a la ciudad para que la asuma como propia. De toda forma la colección es inmensa, pero la parte museable en mucho menor. Muchas son piezas de estudio.