Hace un mes atrás, y luego de más de dos años bajo intervención, el partido de Elisa Carrió en Córdoba se normalizó y realizó un evento de asunción de las flamantes autoridades partidarias. Allí estuvieron Mariano Vera, respaldado y acompañado por el PRO local, y por otro lado Sergio Giachino. Ambos asumieron en ese momento como asambleísta y aguardaban la resolución acerca del armado de las autoridades locales.
No es poca cosa si se tiene en cuenta que hace un par de semanas atrás, con bombos y platillos se difundió un comunicado en el que se dio por armada después de muchos esfuerzos, la mesa departamental con presidentes y vicepresidentes de cada fuerza y se establecieron estrategias para recorrer el departamento circuito por circuito. Allí se empezaron a delinear las candidaturas para las comunas.
Pocas horas después saltaron las quejas: “La Coalición Cívica no tiene Presidente ni Vice, ¿Qué hace ahí sentado Mariano Vera?
Inmediatamente se aclaró que aún faltaba para esa instancia y el propio Gregorio Maqueda se encargó de especificar que El Departamento aún no tenía representantes departamentales.
Hoy llegó un nuevo comunicado en el que especifica que “ La Junta Ejecutiva Provincial de la Coalición Cívica ARI acaba de designar a las autoridades departamentales y de circuito. Gregorio Hernández Maqueda y Elena Guerin llegaron a un acuerdo de Unidad y por primera y única vez, tal y como se estipula en la reforma de la Carta Orgánica, nombraron como autoridades: Presidente: Mariano Vera, Vicepresidente, Sergio Giachino y tesorera Gabriela Macri.
Seguramente algo que no debe haberle caído muy bien el Presidente del PRO Ignacio Sala contra quien Sergio Giachino encabezó un pedido de revocatoria de mandato; a partir de allí, la posibilidad con denuncias y contradenuncias penales, de poder sentarse en una instancia de diálogo se esfumó y habrá que ver, ahora, cómo se resuelve.
Mariano Vera, por su lado siempre se mostró muy cercano a Sala y no fueron pocas las ocasiones en las que manifestó que no compartiría cargos con Giachino.
Pero en la política todo va y viene y además desde “arriba” la decisión fue tajante.
Las voces
Consultado por RESUMEN, Mariano Vera se mostró conforme con la decisión: “Se llegó a una lista de unidad porque era necesaria para llevar adelante de una manera más compacta el partido en todo el Departamento Santa María, teniendo en cuenta que la Coalición Cívica recién está saliendo de una intervención y no podemos dar lugar a otra grieta más”.
Por su lado Sergio Giachino aseguró: “Nunca se me quitó el apoyo desde el Partido y yo seguí trabajando en el territorio y siempre sentí que tenía representación departamental a pesar del cargo oficial. No tengo problemas con Mariano Vera, no lo conozco, pero me parece excelente que un chico tan joven se haya involucrado en el política y en nuestro partido Esta resolución de alguna manera limita que desde otro partido puedan pretender meterse en el nuestro. Es un feno.”.
¿Y la mesa?
El tema será ver cómo sigue la mesa departamental. En épocas navideñas todo es posible, aunque juntar a Ignacio Sala y Sergio Giachino, silla de por medio, parece un hazaña inviable hasta para Papá Noel.
“Si Giachino se quiere sentar o no, es decisión propia de él. Será su decisión, yo la desconozco, pero sinceramente sería un situación incómoda que la deberíamos evaluar puertas adentro, y luego deliberar. El partido tiene que estar sí o sí en la Mesa Departamental de Cambiemos; sin la Coalición Cívica no hay Cambiemos”, asegura Vera.
“Todavía no me invitaron, pero claro que como Vicepresidente tengo el derecho y la obligación de participar. Pero, más allá de eso y de las formalidades, yo trabajo con la militancia y el ARI en eso ha crecido mucho”, afirmó por su parte Giachino.
La revocatoria
Desde hace bastante tiempo La Paisanita es noticia debido al pedido de revocatoria, en manos ahora del Fiscal Enrique Senestrari, del Presidente comunal Ignacio Sala por supuestas irregularidades y las denuncias cruzadas con el ahora ex tesorero Sergio Giachino; idas y vueltas, y un sinnúmero de presentaciones en una comuna de poco más de 120 habitantes y donde la puja política está instalada desde hace varios años.
En julio del año pasado la Secretaría Electoral Federal en base a la denuncia que efectuaron 20 personas contra el jefe comunal de La Paisanita, había resuelto investigar una situación “curiosa y no ajustada a derecho” que tiene que ver con los domicilios de quienes efectuaron esta denuncia. Debido a ésto, fueron citadas aquellas personas que firmaron la revocatoria para clarificar la situación ya que se ha comprobado mediante una investigación en la que participó la Policía y la Justicia, que gran parte de ellos, no viven en el lugar al que hacen referencia.
La doctora Lucrecia Bustos, desde el departamento legal de Pro había afirmado que “el pedido de los vecinos, que aún no tuvo éxito, lleva solo la firma de 20 personas que supuestamente son de la Comuna La Paisanita y La Isla. Grande fue la sorpresa cuando se receptaron pruebas que de esas personas el 40% no vive en los lugares mencionados”.
El 1º de noviembre el Juez Ricardo Bustos Fierro se expidió al respecto. En el expediente caratulado como “Inscripciones múltiples o con Documentos Adulterados Domicilio Falso. Retención Indebida de documento Cívico”, resuelve dejar sin efectos los domicilios registrados de ocho personas que habrían firmado el pedido de revocatoria como residentes de La Paisanita-La Isla. Entre los considerandos de la resolución además el Juez Bustos Fierro se puede leer que “el padrón electoral no reflejaría la realidad del verdadero electorado” y con respecto a los supuestos cambios de domicilio “existiría la posibilidad de vulnerar la verdadera voluntad y/o inclinación electoral de sus ciudadanos”; es decir que con la firma de electores con domicilio falso se pretendía llegar al total de electores requerido para abrir el proceso de revocatoria.
¿Nueva revocatoria?
La exclusión de 8 de los firmantes del pedido debería llevar a un vuelco rotundo en todo el procedimiento, ya que todo pedido de revocatoria debe ser suscrito por el 10% del padrón electoral total que llevó a la elección de las autoridades; porcentaje éste que ya no estaría alcanzado. Para pedir otro procedimiento, además, los tiempos legales establecen que debe esperarse por lo menos un año de la revocatoria anterior. A esto se le suma que ningún pedido según la Ley Orgánica Municipal 8102 este tipo de pedidos, sólo pueden ser llevado adelante luego de un año de la asunción y no después de los 9 meses anteriores a la finalización del mandato. Es decir el 10 de diciembre.
Si los tiempos legales podrían reservar sorpresas en caso de algún fallo del TSJ, los electorales no dejan muchos márgenes; Sala deberá decidir si buscar la reelección antes de abril de este año. «Esa será su revocatoria, el voto popular, aunque con un padrón renovado», afirmó Giachino.
Comentarios: