El rubro hotelero quizás sea uno de los más perjudicados a largo plazo por la pandemia. Es que el turismo es lo último en las filas de flexibilización y mientras tanto los gastos siguen corriendo. En nuestra ciudad hay cantidad de hoteles y alojamientos porque nos caracterizamos por ser una ciudad turística, por ende son muchos los afectados en este marco.
Hotel Ritz es uno de ellos y su dueño, Fernando Tissot, dialogó con RESUMEN acerca de la situación que afrontan: «Tuvimos que suspender el pago de impuestos y servicios, ya que todos los recursos en efectivo se destinan para pagar sueldos».
En cuanto a la «reinvención» que adoptaron durante la pandemia, Tissot nos contó: «Estamos alquilando las cocheras del hotel pero no alcanza ni para pagar un sueldo» y agregó que recibieron ayuda del estado nacional y un gesto del estado municipal con los impuestos pero «es insuficiente».
«Contrariamente a lo que mucha gente cree el margen de ganancia en el sector es muy reducido en épocas de normalidad. En esta crisis y a mediano plazo no se prevé ninguna mejora» reflexionó Tissot. A sus ojos, abriendo las puertas del hotel no habría suficiente demanda para sostener el rubro, y aún sin pandemia sería difícil saldar las deudas contraídas.
Por estas razones el sector solicita la ley de emergencia, lo que quizás sea una ayuda dentro de la difícil situación.