La doctora Mariana Jumene es la única gastroenteróloga que tiene el Hospital Illia de Alta Gracia. O mejor dicho, que tenía, ya que la especialista sufrió la no renovación de su contrato. La doctora Jumene no solo estaba cumpliendo sus horas como gastroenteróloga, sino que además, está colaborando con el equipo Covid. Ante esto, ella había presentado un pedido para que se mejoren sus condiciones laborales con el apoyo de la Unión de Trabajadores de la Salud (UTS), pero la respuesta no fue la esperada y así derivó en la situación actual.
Desde la UTS emitieron un comunicado en apoyo a Jumene:
«Despido persecutorio de una médica en plena pandemia.
Desde la UTS denunciamos el despido persecutorio Mariana Jumene, médica gastroenteróloga y hepatóloga del Hospital Arturo Illia de Alta Gracia. Las autoridades aprovechan la situación de precariedad de contratación que ellas mismas propician y ahora la despiden, pese a tratarse de la única profesional de la especialidad en el establecimiento y estar prestando servicios más allá de lo contemplado en su contratación, colaborando frente a
la pandemia. Justamente cuando había iniciado un reclamo junto a las y los delegados de UTS para que se respeten las mínimas condiciones de trabajo para poder desempeñarse correctamente llega la notificación de la rescisión anticipada de contrato. Esto se suma al despido del licenciado en enfermería Pablo Mercado y al enfermero profesional Facundo Paredes que se desempeñaban en la Unidad de Terapia Intensiva COVID adultos del Hospital Domingo Funes de Punilla que denunciamos anteriormente. Al parecer, el maltrato a los trabajadores y trabajadoras de salud es política de Estado. Con causas judiciales, persecución a los delegados gremiales y ahora despidos. El gobierno no sólo no garantiza correctas condiciones de bioseguridad y una buena remuneración sino que echa a una trabajadora de salud en plena pandemia. Claramente estas medidas no responden a un criterio sanitario, ya que debilitan la atención en un momento en que es incluso más necesario que nunca fortalecerla. Por este y otros reclamos seguimos adelante con el plan de lucha que hemos lanzado desde UTS junto a la Multisectorial de Salud. El miércoles una jornada de lucha con asambleas en los hospitales y centros de salud y el 10 con el paro y caravana por la capital».
Gaston Vacchiani
Secretario General
Tal como finaliza el texto, el 10 de noviembre será el paro con presencia en los lugares de trabajo y el Illia parece que será uno de los hospitales públicos con mayor rechazo a las medidas, debido a que esto reaviva el conflicto fuertemente.
Uno de los delegados de la UTS en Alta Gracia comentó a RESUMEN que esta medida es para «hacer aprietes y para que no tengamos derecho a reclamar mejores condiciones laborales». Además, destacó que el Gobierno está sacando especialidades del Hospital, como odontología, ORL, oftalmología y ahora gastroenterología. «Sería un abandono de pacientes porque si no hay gastroenterólogo, no hay quien los atienda» finalizó.
Desde mañana en el Hospital Illia sus compañeros y delegados de la UTS juntarán firmas para la pronta reincorporación de la doctora Jumene. «Podríamos extenderlo a la sociedad» indicaron a RESUMEN.