La tarde del sábado 23 de febrero nos daba la posibilidad de ver por primera vez al modelo 2013 del “merengue”. Llegaba a nuestra ciudad el siempre complicado Independiente de Villa Carlos Paz. Los técnicos habían consensuado en jugar dos tiempos de treinta minutos tanto en Reserva -igualaron 2 a 2- como así también en Primera.
El partido principal inició entretenido y parejo. De todas maneras, se notaba la dureza de la pretemporada por las imprecisiones de ambos equipos.
El visitante, que iniciará el año en la División B1, tuvo su primera situación de peligro y la concretó. Fue un tiro libre frontal que tras un desvío fue a parar al fondo de la red. Inmediatamente, el visitante aprovechó un penal para poner el 2 a 0 parcial. Así se fueron al descanso.
En la segunda mitad, el partido se degeneró. Comenzaron a jugar más con las manos que con los pies en cada jugada dividida. El árbitro debió terminarlo antes, ya que no convenía a nadie la continuidad del partido.
A poco del final, en una de las tantas faltas fuertes de esta etapa, volaron e impactaron en el rival de turno varios golpes de puño y la situación se descompuso totalmente. Por suerte, no pasó a mayores; pero fue el detonante para que el “amistoso” llegara a su fin.
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