Jerónimo Torillo es un altagraciense aventurero que desde hace algunos meses, junto con su hermano y unos amigos, decidió iniciar un viaje como mochilero, el cual lo llevara, como destino final, a conocer el Caribe. No obstante, en medio de esa aventura, tuvo que vivir una de las experiencias mas terribles que podría haberse imaginado, el sismo que hace pocos días azotó de manera fatal en varias localidades de Perú.
En diálogo con RESUMEN, desde Tarapoto, localidad ubicada a solo dos horas de Yurimaguas, epicentro del terremoto, el joven cuenta cómo vivió en carne propia, la desesperación provocada por el fenómeno. «Era el domingo a la madrugada, yo estaba en la habitación del hostel, sólo, con la luz tenue del celular, cuando todo empezó. Al principio fue despacio hasta que de repente se empezó a caer todo. En ese momento atiné a salir de la casa, estaba en un segundo piso y el dueño del hostel empezó a los gritos diciendo que la casa se caía y no podíamos abrir la puerta. Fue horrible, tuvimos mucho miedo», comenzó narrando el joven vecino de B° Pellegrini.
Ante la imposibilidad de abrir la puerta del apartamento donde estaban, el joven se metió debajo de la mesa de un televisor. Hasta que segundos después, la puerta se abrió y corrieron hacia afuera. » Temblaba todo y la puerta no se abría, corrí abajo de la mesa de un tele hasta que cuando se abrió salimos. Lo que pasaba afuera era terrible. La gente que salia de casinos o bares porque era fin de semana, estaba toda en la calle llorando, en pánico, corriendo desesperada. Los postes se caían, no estabas a salvo en ningún lado. Yo corrí hacia una plaza» agregó.
El caos perduró por varias horas, la gente estuvo sin poder dormir y nadie quería ingresar adentro de sus casas. «Yo me fumé un cigarrillo y después ingresé al hotel pero me quedé sentado toda la noche. Esperando la replica que por suerte en ese momento no ocurrió».
Por fortuna, Jerónimo se encuentra bien y no es un dato menor, luego de que se conociera el verdadero desastre que el sismo de casi 8° y con dos replicas de 4 y 5, ocasionó en distintas partes de Perú.
Por lo pronto, el joven decidió quedarse por un tiempo más en Tarapoto, ciudad que quedó algo golpeada pero que esta cargada de todo aquello de lo que él fue en busca. «Por ahora me voy a quedar un tiempo acá, selva adentro. Es una comunidad donde se practica Reiki terapéutico, chamánico, acupuntura, músico terapia, entre otras cosas. Esta a una hora por el río adentro de la selva y me parece rico poder hacer alguna tarea comunitaria. Me gusta porque es rica culturalmente»,dijo.
Cabe destacar que en este viaje, Jerónimo terminó solo en ese lugar del mundo, ya que algunos de los jóvenes con los que emprendió el viaje, decidieron volver a Argentina y otros prefirieron ir rumbo la costa peruana. » Yo elegí aventurarme solo por la selva peruana», concluyó.
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