“Cuando estaban haciendo la obra vial nos quejamos, pero después entendimos que es lógico el desvío. Ahora, ¿qué excusa hay? Somos docentes y alumnos del colegio del barrio y nos dejan en plena noche sobre la ruta sin ninguna explicación, con los riesgos que eso significa si tenemos en cuenta el nivel de inseguridad en el que vivimos”, se quejó Patricia, una docente.
Hace algunos meses, el titular de la empresa manifestaba que era “imposible trasladarse en ese barrio debido a que diariamente desde la Municipalidad cambiaban de lugar los desvíos por los trabajos que se realizaban”; sin embargo, aseguraba que una vez concluidas las obras, “volvería todo a la normalidad”; hecho que no fue así.
Otro de los reclamos que se realizan al respecto es que desde la empresa no hubo ninguna información sobre el tema y que cuando consultan a los choferes “no hay respuesta”.
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