Monica nació en 1950 se formó en la Escuela Nacional de Arte Dramático y debutó en cine a los 24 años en la recordada película La Mary, protagonizada por Susana Giménez y Carlos Monzón.
Además de reconocidos éxitos, desde la ciudad se recuerda su visita ya que fue figura destacada del documental ficcionado que José Luis Castiñeira de Dios, dirigió sobre la vida del músico y compositor Manuel de Falla, «Músico de dos mundos» (2007).

Sobre el documental ficcionado
La voz en off se corporiza en Elisa (Mónica Galán, en pose eterna), una historiadora que investiga cómo fue el exilio de Manuel de Falla en Argentina y necesita ayuda de alguien que aporte “prestigio” a su trabajo. Para eso, contacta a Ulises, un periodista “experto en la vida de los exiliados” (un impresentable Luis Luque) quien acepta la propuesta laboral pese a su manifiesto desconocimiento musical. Algo confundido y todavía vacilante tras su decisión, Ulises llega hasta una plaza donde encuentra una cabina telefónica roja, al mejor estilo londinense, y se detiene frente a ella dispuesto a reparar su ignorancia. El piar de los pájaros es tapado por la voz en off, en este caso la del mismo Ulises que, al mejor estilo Chapulín colorado y el “ahora quién podrá defenderme” de los personajes en aprietos, vocifera con sorna involuntaria un “ya sé a quien puedo llamar”, mientras los ojos de Luque se abren en señal de alegría y alivio ante la salvadora epifanía. No hay nada de malo con la narración en off per se, pero después de Historias extraordinarias, la concepción de este recurso debe cambiar. Mariano Llinás la utiliza durante las cuatro horas de su película y la voz en off jamás se agota debido al espíritu lúdico del narrador y la autoconciencia sobre la redundancia de la misma, cualidades que brillan por su ausencia en Manuel de Falla, musico de dos mundos.

Desde el Museo Manuel de Falla, recordaron su visita.