Alta Gracia. “El de remolacha es riquísimo”, confiesa el docente Fernando Piñero. Habla de los helados que un grupo de estudiantes de sexto año del Instituto El Obraje, de Alta Gracia, desarrollaron y con el que ganaron el premio del Taller de Innovación Social de la Fundación Córdoba Mejora.
El proyecto Fruver consiste en una línea de helados saludables, elaborados con frutas y verduras. “Se dio en el marco de un taller experimental sobre innovación social, en el que los estudiantes proponen soluciones a problemas que ellos se plantean”, detalló Piñero, a cargo del proyecto junto al docente Federico Ferrario.
“Nosotros trabajamos con un abanico de problemas. El principal era la comida chatarra y la mala alimentación de los estudiantes. Así fue que los chicos desarrollaron una golosina saludable”, dijo.
Pero los peculiares gustos no son la principal innovación: los dos sabores pueden separarse, y al calentar el de verdura en el microondas, resulta una sopa exquisita. “De hecho, el palito es una cucharita para tomarlo como sopa”, completó Piñero.
Participaron en la final 10 escuelas de la provincia, cuyos proyectos fueron seleccionados por un jurado integrado por representantes de la Universidad Siglo 21, McAfee, Taller Technologies y la Fundación Córdoba Mejora. Los siete alumnos de Alta Gracia premiados serán becados por la Universidad Empresarial Siglo 21.
Para sus docentes, el próximo desafío será imponer el producto en la cantina escolar, y generar así hábitos efectivos de consumo saludable.
Cambio cultural
El objetivo del Taller de Innovación Social es “brindar a los jóvenes herramientas para desarrollar proyectos que brinden soluciones creativas a problemas concretos”, explicó Miguel Hée, director de la Fundación Córdoba Mejora.
“Creemos que aporta una nueva forma de trabajar en la escuela y que genera un cambio cultural”, aportó Clara Cunill, directora del Programa de Líderes Educativos.
Esta tercera edición contó con la participación de 400 jóvenes de distintas escuelas. Otro premiado fue el Ipet 89 Paula Albarracín, que presentó brownies con harina de mandioca, aptos para personas con celiaquía.
Fuente: La Voz