Lo que se pensaba que iba a ser una jornada de definiciones en el juicio por el homicidio del sacerdote Luis Cortés, se convirtió en un día clave, pero no concluyó ahí.
Este viernes se cumplió el tercer día del proceso judicial que se lleva adelante en la Cámara 11 del Crimen; y la finalización será el próximo miércoles donde se dará lugar al alegato de la Defensa y el veredicto del Jurado.
El padre del imputado, Jesús «El Gringo” Díaz, se hizo presente y brindó una declaración que coincidió con la que ya había proporcionado hace un año atrás a la Fiscalía local. En la misma cuenta que su hijo lo llamó por teléfono el domingo posterior a la muerte del sacerdote mientras él almorzaba con su hija y su yerno y le manifestó que tenía que contarle algo. Como «Pinguchi» no quiso decírselo por teléfono, le ofreció que viniera a su casa. «Me mandé un cagadón, se me fue la mano (y se largó a llorar). Entré a robar al Padre, lo ahorqué y le prendí fuego», le habría confesado el joven.
Ante la pregunta de la Querella (el abogado Daniel Villar), de la razón por las que brindó esa declaración de manera espontánea en aquella oportunidad, el padre del imputado afirmó: «Iba a estar mal si no decía la verdad, le pido disculpas a mi hijo». La Defensa, en tanto, reparó en detalles sobre la manera en que brindó su declaración, sobre el hecho y consultó si conocía al sacerdote: «De vista», dijo Díaz; «no trabajaba para él», agregó.
Posteriormente tomó la palabra el imputado y brindó una versión diferente a la que había proporcionado el primer día del juicio. «Mi padre tenía las cosas del cura y él me pidió que las vendiera. No sé si mi padre tuvo algo que ver, lo que sí se es que él tenía las cosas. Y hablo para que se investigue bien y den con el verdadero autor del hecho. No hablé antes porque no quería que mi padre pasara los años que le quedan de vida en la cárcel. Lo vi detenido ya muchas veces”, dijo luego de dar detalles sobre la manera en que supuestamente «El gringo» Díaz le había dado las pertenencias.
Careo
A raiz de un pedido de la Defensa «Pinguchi» y «El gringo» se enfrentaron en un careo que se extendió por algunos minutos donde ambos sostuvieron sus posiciones: «¿Por qué decís que fui yo? ¿Por qué mentís?», decía Díaz padre, a lo que «Pinguchi» respondía: «Te prometí que me iba a callar, pero no aguanto más».
Posteriormente el proceso judicial pasó a cuarto intermedio y se dio lugar a los alegatos.
Tanto el Fiscal de Cámara Diego Albornoz (quien destacó la investigación llevada adelante por su par Emilio Drazile y la calificó de «impecable») como la Querella insistieron en mantener la imputación «Homicidio criminis cause» y pedir perpetua para «Pinguchi». La Defensa, en tanto, deberá esperar hasta la semana que viene.
Cabe destacar que mientras el Fiscal daba detalles sobre la manera en que supuestamente el detenido había llevado adelante el crimen, el magistrado se preguntó: «¿Por qué este chico culparía a su padre?»; en ese momento una de las hermanas del imputado rompió el silencio y aseveró: «Lo involucra al padre porque el padre es el culpable, por eso lo culpa». Inmediatamente la joven fue retirada de la sala.
Sobre la tensa jornada vivida este viernes en Tribunales II, la Querella sostuvo que se trató de una «puesta en escena» del imputado.