Martín Gill, intendente de Villa María volvió a ganar en sus ciudad en junio con 54,5 por ciento de los sufragios. En las últimos meses, Gill ha acompañado a las visitas del candidato a Presidente Alberto Fernández y suena como uno de los cordobeses que podrían ocupar un rol preponderante a nivel nacional en el caso de triunfo del Frente de Todos. Resumen dialogó con el joven mandatario acerca de este particular momento del peronismo cordobés, entre la boleta corta y una elección nacional fuertemente polarizada.
Estuvo con Alberto Fernández en los últimos días, junto con varios Intendentes y referentes de la Provincia…
“Estamos trabajando en el marco de los que se decidió en el Congreso del Partido en el que se definió llevar adelante una lista corta de Diputados que encabeza Carlos Gutiérrez y que representa esencialmente los intereses del justicialismo de Córdoba y del Gobierno de las Provincia. Pero en el tramo presidencial nos ha sido dada libertad de acción y de criterio. En ese marco, muchos intendentes y legisladores, consideramos que la opción que mejor representa los intereses para la Argentina que viene es Alberto Fernández. En ese sentido buscamos no solo trabajar para el candidato, sino para tender puentes y tejer diálogos y poner fin a una página de desencuentros que ha tenido Córdoba y Nación en mucho tiempo. Alberto, a pesar de no haber sido parte de esos desencuentros, ha sido muy generoso y muy criterioso, para no repetir la historia”.
En el caso de Villa María se dio un triunfo más que amplio de Hacemos por Córdoba y de su gestión y, pocos meses después las PASO fueron en sintonía con el resto de la Provincia. ¿Es un riesgo nacionalizar las elecciones locales?
“Muchas veces los frentes electorales locales tienen configuraciones distintas, como pasó en el caso de Villa María donde se sumaron varios sectores y se generó una alianza todavía mayor a la que se había planteado a nivel provincial. En las elecciones locales el pulso los determinan los actores locales y en un contexto en el que las posiciones más dogmáticas ceden a la una realidad que tiene rostro y que brega por una gestión muy intensa con una problemática de todos los días y la gente sabe cuándo un gobierno es activo, presente y se la ingenia para buscar soluciones aun en el medio de un contexto con el viento de frente”
Hablando de Alta Gracia, por ejemplo, el Intendente Torres ocupa un lugar en la «boleta corta» y además se encuentra en un momento electoral de su ciudad. ¿Cómo evalúa esa prudencia en no apoyar abiertamente ni uno ni oro candidato a Presidente? Tienen diálogo?
«Con mucho respeto y sí, tenemos constante dialogo. Primero porque Facundo es quien conduce nuestro espacio de Intendentes en la Provincia y lo ha hecho siempre con mucha responsabilidad, compromiso y vocación. Pero además de eso es un compañero y un amigo con el que tenemos una visión común y muy coincidente. De hecho fue el primer Intendente que recibí en Villa María cuando asumí y el primero con el que firmé un convenio para trabajar conjuntamente y todo lo que conocen acerca de los festivales y del turismo. La de Facundo es una de las grandes gestiones y, por supuesto,él es uno de los grandes dirigentes del peronismo cordobés».
¿Cómo lo ve a Marcos Torres? Va a venir el domingo en el caso de triunfo?
«Por supuesto que el domingo estará acá. Claramente Marcos representa un proyecto de continuidad de una gestión más allá que cada uno de ellos tenga su perfil y su carácter bien marcado. Marcos seguramente va a consolidar esta forma de gobernar la ciudad y ojalá que lo pueda hacer aún mejor y pueda ser aún mejor Intendente que Facundo, porque eso significa que le va a ir mejor a toda Alta Gracia, sobre todo en un país mejor. Es muy positivo que este proyecto político de Facundo y de Marcos apueste a la renovación de sus dirigentes y aporte la posibilidad de progreso con nuevos cuadros, ideas e integrando nuevos sectores, en línea con lo que es Hacemos por Córdoba«.
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