Más de cuatro horas duró la batalla final por el oro en tenis de los Juegos de Río 2016. Y fue realmente eso, una batalla entre dos colosos; uno, el número 2 del mundo encumbrado en su gran presente y otro, que definitivamente está volviendo a su nivel, lleno de esperanzas.
Andy Murray fue nuevamente el dueño de la medalla dorada. Ganó el juego en forma apretada, justicieramente con parciales de 7-5, 4-6, 6-2 y 7-5, tras cuatro horas y tres minutos de enfrentamiento.
Para Del Potro quedará la sensación de que definitivamente «volvió» al tenis luego de sus problemas físicos, y que lo hizo de la mejor manera, dejando en el camino a varios de los que hoy son top ten en el mundo. Su Medalla de Plata lo honra y emociona a todos los argentinos.
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