Luis Millán es un nombre que los vecinos de Alta Gracia y sobre todo los bomberos, recordarán por siempre por su acto heroico de aquel 30 de enero de 1981. Ese día Millán, que era Sargento Primero Jefe de Bomberos, asistió a un trabajador que estaba realizando tareas de mantenimiento en el pozo del lavadero de una estación de servicio.

Ese pozo de unos 15 metros de profundidad, contenía gases y residuos tóxicos que son normales en las estaciones. El trabajador había ingresado sin los equipamientos adecuados para respirar en ese lugar, y los mismos solo los tenía el cuerpo de Bomberos. El hombre dentro del pozo se quitó el equipo que le habían proveído y Millán tuvo que ingresar a salvarlo, pero el mismo ambiente contaminado hizo que ambos pierdan el conocimiento, muriendo más tarde. Posteriormente, los cuerpos fueron rescatados con un equipo de buceo de Héctor Buppo.

El próximo jueves 30 se cumplen 40 años de aquel día y la Asociación de Bomberos Voluntarios de Alta Gracia junto a la Agrupación de Veteranos realizarán un homenaje a las 19 horas en el monolito que lo recuerda, en la intersección de las calles Millán y Bolivia.