Este mañana un grupo de referentes de distintas organizaciones sociales, políticas y sindicales de la región , cortaron pacificamente la calle Avellaneda y se manifestaron en frente al Museo Casa del Che a favor de Nicolás Maduro y del gobierno de Cuba, entre otros reclamos.
El documento
La convocatoria fue realizada a través de una carta firmada por todos los espacios que participaron
«Las y los abajo firmantes, organizaciones sociales, políticas, sindicales, ciudadanos y ciudadanas de Córdoba, Argentina, expresamos nuestro más firme apoyo al pueblo y gobierno venezolanos y rechazamos la injerencia de los Estados Unidos y una parte de los gobiernos latinoamericanos, entre ellos el presidente argentino, Mauricio Macri. El autodenominado Grupo de Lima, un verdadero cartel de gobiernos neoliberales, neofascistas y guerreristas, carece de autoridad moral para juzgar y condenar al gobierno que el pueblo venezolano ha elegido de manera soberana.
La amenaza de invasión militar formulada por el presidente norteamericano Donald Trump, lleva a un punto más alto esta violación a la autodeterminación de los pueblos y atenta contra la soberanía nacional del hermano pueblo de Simón Bolívar. Los EE.UU. pretenden, en nombre de la “libertad”, la recolonización de lo que siempre han considerado su patio trasero; por ello la lucha del pueblo y gobierno bolivariano es en legítima defensa de la Patria y para que se respete la voluntad del pueblo.
Denunciamos la incesante campaña de desprestigio que se desarrolla a nivel regional y mundial contra el legítimo gobierno de Nicolás Maduro, quien fue elegido presidente por el pueblo en las elecciones del pasado 20 de mayo del año 2018. Desde el triunfo de la revolución bolivariana en 1998, las corporaciones económicas, mediáticas y armamentísticas, acosan a Venezuela, con sanciones como las impuestas en 2015 con el infame decreto de Barak Obama, que declaró a Venezuela “una amenaza inusual y extraordinaria” a la seguridad nacional de los EE.UU.; y luego ratificadas en 2017 por Donald Trump. El bloqueo, las sanciones y el embargo son las principales causantes del desabastecimiento de alimentos y medicamentos, dentro de una guerra económica brutal que padece el pueblo venezolano desde adentro y fuera del país.
El robo de miles de millones de dólares de los activos de Venezuela en el mundo, no hace más que agudizar las penurias económicas y sociales del pueblo venezolano y desnuda la hipocresía de pretender ofrecer una “ayuda humanitaria” de 20 millones de dólares. Ésa ha sido la excusa utilizada por el imperialismo yanqui para justificar invasiones como en Yugoslavia, Irak, Libia, Siria, etc., y que sólo trajeron guerra y sufrimiento para esos pueblos. La verdadera causa de las agresiones y mentiras con que acosan a Venezuela son sus inmensas reservas petroleras, de agua y biodiversidad, además del oro, litio y coltán, recursos a los que quiere echar mano la potencia imperialista.
Los gobiernos de Chavez y Maduro fueron ratificados por la voluntad popular, al imponerse en 23 de las 25 elecciones que se han realizado en Venezuela desde 1998. Esos comicios se han realizado con veedores internacionales y con un sistema electoral que no fue cuestionado por la oposición cuando salió triunfante en elecciones regionales y parlamentarias. La República Bolivariana de Venezuela tiene una democracia plena y participativa, que emana de una Constitución aprobada mediante un plebiscito el 15 de diciembre de 1999.
Con un pueblo movilizado en defensa de los logros de la revolución –aún con aciertos y errores- y unas Fuerzas Armadas Bolivarianas leales a la Constitución, Venezuela exige respeto a sus leyes y a su Carta Magna, proponiendo el diálogo para que se imponga la Paz con justicia social. Una guerra en Venezuela sería catastrófica y afectaría a toda la región que ha sido declarada de manera unánime como Zona de Paz.
Por ello, nos constituimos en “VENEZUELA BOLIVARIANA SE DEFIENDE”, para expresar nuestra solidaridad con el pueblo venezolano y el gobierno del presidente Nicolás Maduro; a la vez exigimos al gobierno de Mauricio Macri que respete el principio de autodeterminación de los pueblos, y que desconozca al usurpador Juan Guaidó, cabeza visible del golpe de Estado en curso.»