La orden que Mauricio Macri les bajó a sus ministros ayer es que se deshagan de familiares que ocupan puestos en el Estado. Y aunque la medida sólo abarca a los funcionarios del Gobierno nacional, en la Provincia dejaron claro que no habrá efecto contagio. Así lo ratificó a La Voz el ministro de Gobierno, Carlos Massei: “A los funcionarios se los evalúa por su capacidad, no por su parentesco”.
Defendió así la designación de familiares en la administración pública y la discrecionalidad del funcionario de alto rango para elegir a sus colaboradores. “Nuestro compromiso con la sociedad es cumplir con el programa electoral, y el funcionario elige los recursos para alcanzar los objetivos”, dijo.
El hijo del gobernador Juan Schiaretti, Mariano, encabeza un listado de funcionarios del Gobierno provincial que llegaron a la función pública junto con la designación de familiares directos en altos puestos del Ejecutivo.
Desde el 1 de febrero de 2016, días después de la llegada de Schiaretti al Centro Cívico, Mariano es vocal del directorio de la Agencia Córdoba Deportes. En noviembre del año pasado cobró 41.100 pesos de bolsillo, según los datos publicados por la Provincia en el Portal de Transparencia. Bajo su ala se desarrolla el CBA X, un programa de deportes extremos. “Fue una propuesta de mi viejo”, contó meses atrás.Otro caso es el del hijo del ministro de Educación, Walter Grahovac, quien también tiene un cargo en el Estado provincial: Manuel Grahovac es el director de Integración y Planeamiento, y cobra 48.514 pesos de bolsillo.
La respuesta oficial
Massei fue categórico y prefirió no responder los casos citados en esta nota. “La vara para medir a los funcionarios es el cumplimiento de los objetivos, que requiere muchas horas de trabajo. Creemos que el compromiso con la sociedad es cumplir con el programa electoral que los cordobeses votaron, con el proyecto de obras públicas y programas sociales; y el político debe armar su equipo para esos objetivos”, dijo.
Tras el anuncio de Macri, Massei señaló que la Provincia “no tomará medidas” respecto de la salida de funcionarios o de congelamiento de salarios. Cuando Schiaretti llegó al Centro Cívico, la planta superior contaba con 169 funcionarios; actualmente hay 179 (según datos oficiales a septiembre de 2017).
“Seguramente, el presidente Macri hizo una evaluación del Estado a la hora de tomar las decisiones que tomó y de las cuales el Gobierno de Córdoba no va a opinar. Nosotros no tomaremos medidas de excepción que impliquen recorte o congelamiento de salarios de funcionarios porque tenemos una gestión austera que cuida los recursos, lo que permitió en dos ejercicios consecutivos –2016 y 2017– obtener superávit fiscal”, resaltó Massei.