Ya hace varias semanas que Mario Bonfigli asomó cabeza de nuevo y volvió a ocupar un lugar importante en la agenda política. RESUMEN dialogó con él en un mano a mano en el que, por sobre todo, hizo referencia a la sociedad de Cambiemos, al rol de la UCR y a las candidaturas para el 2019.
La sentencia que lo inhabilita, ¿es firme?
No, está apelada porque no estamos conformes con la acusación que se hizo.
¿Le costó recuperarse de ese golpe?
No, porque vivo en Alta Gracia, la gente sabe, nos conocemos todos, sabemos quién es quién. Tengo la conciencia limpia.
Se lo vio en un brindis. Un día antes en un acto. La sensación es que despertó muchas expectativas. ¿Hay alguna presión para que vuelva a presentarse?
El grupo que yo integro tiene mucha experiencia de gobierno y aspira a que el radicalismo se una. Yo me enrolo en eso también; yo no me estoy enrolando en ser candidato, ni a ningún cargo que se le parezca, ni intendente, ni nada; estoy ahí porque me siento en la obligación moral de ayudar.
¿Cómo van a terminar eligiendo el candidato?
Si seguimos la doctrina tradicional radical, será una interna, porque siempre la hubo en todos los períodos.
Pero la interna se les complicó. Tienen socios en Cambiemos…
Eso está en la habilidad de quien gane la interna. Si tiene un carácter y una templanza especial, obviamente que puede agrupar a los que perdieron. Yo lo hice.
Tendrían que incorporar otros partidos en la gestión. Uds. ¿siguen siendo una coalición, o va ir la UCR sola?
No creo que nos autoricen a ir solos, pero de todas maneras, estoy convencido de que el candidato va a ser radical. Y va a ser quien tenga la obligación después de juntar a los pollos, como se dice, de nuestro partido y de los socios de la coalición Cambiemos.
Y en la lógica del que más mide, ¿es posible que se elija de esa forma al candidato?
Sería buenísimo, yo siempre pugné por eso. Para mí la encuesta bien hecha, te marca al dedillo lo que quiere la gente.
Si mide mejor Morer, ¿va él?
Por supuesto.
¿Y si mide mejor Bonfigli?
No, porque se trata de el que mida más pero que tenga ganas de ser candidato. El que no tiene ganas, no puede medirse.
Sin embargo, Morer nunca dijo que quiere ser candidato. No hizo anuncio oficial ni se postuló.
No, él está esperando a que la UCR lo diga, lo apruebe, ya sea por consenso, por encuesta, o por interna. Sería una falta de respeto si él se autoproclamara candidato sin que la UCR haya definido esta cuestión.
Es un poco lo que pasó con Tincho Gay. ¿Cómo lo vivieron?
Los integrantes de nuestro grupo interno estamos acostumbrados a que en la política existan estas ambiciones rápidas y sorpresivas. Pero no, no nos molesta en lo absoluto.
Volviendo a Morer… era su pichón…
Sí, mi sector lo puso de candidato a Vice.
¿Se quebró algo?
Bueno, él después decidió abrirse camino solo y juntarse con Germán Rodríguez.
Pero ahora ya no… están en veredas opuestas.
Extrañamente los antiguos socios de él están separados.
Está un poco solo como radical Morer...
Si, por eso creo que él se recuesta mucho en Cambiemos
Pero si él mide más, ¿lo van a acompañar?
Yo sí, por lo menos. Si Leandro Morer mide más, lo voy a acompañar. No puedo hablar por los otros.
Un dirigente del radicalismo dijo, off the record, que en este momento Cambiemos tiene dos problemas: uno es Leandro Morer y el otro el Presidente del PRO…
Puede ser. Me parece que Ignacio Sala se equivoca cuando apunta con el dedo cuáles radicales deberían estar, o no, en Cambiemos. Primero debería preguntarnos si uno quiere ser PRO, o quiere ser Cambiemos; a mí me tiene sin cuidado eso. Nací radical y voy a morir radical.
¿El radicalismo está cerca de resolver su problema de tensiones internas?
Sí. Nosotros nos sentamos en una mesa, charlamos, tomamos un café y debatimos sobre lo que quiere uno y lo que quiere otro. No veo que en otros sectores de la coalición esto ocurra.
Esta sociedad que tienen con Cambiemos, ¿los complica a los radicales?
Lo único que complica son esas ganas que tiene el radicalismo de gritar algunas cuestiones políticas que creemos están equivocadas.
¿Los unió el espanto en 2015?
Lo importante es saber si la unidad fue para superar algunas cuestiones que eran insuperables sino había una coalición. Dio sus frutos, porque pudimos frenar esta potencia para el mal que tenía el kirchnerismo.
¿Tienen que levantar la voz para el 2019?
Macri tiene todas las mejores intenciones del mundo, para mí es un tipo honesto. Pero el radicalismo tiene que ser custodio de la cuestión política.
Hace poco se conformó la mesa departamental de Cambiemos con una foto que debería dar un pantallazo de unidad y amor. ¿Es así? ¿Están contentos?
Para que el amor se transforme en casamiento falta algún radical de Alta Gracia en esa mesa, sino es como una empanada sin relleno. Alta Gracia representa más del 47% del padrón del Departamento Santa Maria.
Por último… ¿quién va a ser el candidato provincial?
Ramón Mestre
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