Una vez más el doble discurso y las acciones de los ciudadanos atentarían contra las leyes y la seguridad en las rutas. Sabido es que durante todo el año -y más en temporada estival- el control de la policía caminera sobre Ruta 5, se realiza luego de trasponer el sector de la “Curva de la S”, a la altura del depósito que posee un supermercado de Alta Gracia en la zona.
Pero es evidente que este control policial es un obstáculo que pretenden evadir unos cuantos conductores que por una u otra razón no están dispuestos a ser sometidos al contralor policial y se las habrían ingeniado para burlarlo. Para ello estarían utilizando trazados públicos y también campos privados que convirtieron primero en una senda y más tarde en un camino precario útil para distintos propósitos.
La línea de frontera
Sin dudas, los ingeniosos artífices de este camino “pirata” trazado lisa y llanamente para evadir controles cuando los vehículos no están en regla o para cuando se busca delictivamente huir de la policía no lo hicieron al azar. Este camino estaría en la frontera, en el límite mismo de las jurisdicciones de las municipalidades de Anisacate y de Alta Gracia (al menos en su tramo inicial) y por ende, se hace muy complicado poder tener poder de vigilancia y control por parte de los organismos oficiales.
Este camino nacería en la calle San Martín (que marca el límite entre las municipalidades, desde donde partiría a mitad de cuadra entre las calles Gregoria Matorras y Remedios de Escalada. Buena parte del recorrido trancurriría dentro de una propiedad privada, cuyo dueño, o bien dio el permiso para el tránsito por sus terrenos, o bien estaría pecando de inacción al observar que un extraño e ilegal tránsito vehicular circula por sus tierras.
Vehículos en mal estado
“Vemos circular muchas motos, con tripulantes sin casco o vehículos en mal estado que seguramente no pasarían un control de la Caminera”, explica uno de los pocos vecinos de la zona que se animan a levantar la voz por este tema. Es que a muchos les preocupa que esta improvisada vía de comunicación a modo de “by pass” para eludir controles sea utilizado no solamente por vehículos “flojos de papeles” sino también por delincuentes que encuentran así la forma de escapar de los retenes policiales.
Como sea, este camino irregular estaría siendo utilizado desde hace casi 8 meses, y el tránsito por el mismo lleva a quienes lo circulan, desde el comienzo del éjido de Anisacate hasta las inmediaciones de barrio Parque San Juan, llegando a la ruta C-45 sin ser controlados por nadie.
Sin sanción
Hasta ahora, ninguno de los dos municipios ha llevado adelante medida alguna para cerrar este camino. El vacío jurisdiccional y cuestiones de derecho hacen que por ahora los que deseen circular en infracción por el sitio, puedan hacerlo, sin impedimento alguno.
Cuestión de derecho
Consultados funcionarios de Alta Gracia y Anisacate respecto a este tema, cuando mucho alegan que “hemos escuchado comentarios pero no tenemos una denuncia o un hecho concreto que nos permita actuar”, tal cual lo dijo un alto miembro del Ejecutivo de nuestra ciudad, que eligió preservar su nombre hasta tanto y cuanto “profundice en la investigación del tema”.
Lo concreto es que más allá del conocimiento que pudieran tener al respecto, el Estado como tal tiene las manos atadas ya que buena parte del trazado de este camino está en tierras privadas. “El Estado no puede actuar sobre la propiedad privada. Un vecino está en su derecho de permitirle el paso a quien lo desee, puede habilitar, si lo deseara, una servidumbre de paso por sus tierras y está en su derecho hacerlo. Lo ampara el Código Civil”, aclara un abogado del foro local.
El interrogante por resolver es saber qué puede hacerse desde el Estado si ese derecho de un particular termina atentando contra la ley o si directa o indirectamente se convierte en herramienta para el delito.
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