En camino al séptimo mes de gestión, el presidente Alberto Fernández, mostró con suficiente eficacia el manejo de la pandemia. Este hecho agravó sin lugar a dudas la situación económica, que venía en un franco retroceso y que era el principal desafío al inicio de la gestión.
El grave problema del peso de la deuda, con la amenaza del default, pasó a segundo plano con la irrupción del Covid 19. Valoramos desde el Partido Laborista el accionar presidencial en la cuestión sanitaria, sobre todo el trabajo en conjunto con sectores de la oposición, principalmente, con el gobernador de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Rodríguez Larreta. Hecho que redundó en un apoyo mayoritario de la ciudadanía, puesto en evidencia en las encuestas, con los niveles más altos de imagen positiva de estas dos figuras.
La estrategia sanitaria fue efectiva en disminuir los riesgos de contagio, permitió preparar el sistema ante la creciente demanda que provocaría el avance de la pandemia, y se logró mantener de manera significativa una baja tasa de mortalidad. Las dificultades se presentan debido a que no hemos logrado traspasar el pico de la pandemia. En nuestra provincia, como en todo el país, se empieza a manifestar de manera creciente el enojo y la bronca de la gente de no poder ejercer su actividad económica, con el consiguiente cierre de empresas y aumento de la desocupación. Escuchamos las voces de alarma de algunos intendentes del conurbano bonaerense de volver a una situación similar al 2001. De posibles estallidos sociales, que tienen a su vez, un efecto de contagio no menos preocupante que el virus.
En momentos que la estrategia de la cuarentena manifestó cierto desgaste, vimos como un punto de inflexión, el proyecto de expropiación de Vicentín, una de las principales empresas procesadoras y exportadoras de granos del país, medida impulsada por el kirchnerismo. Como manifestó, nuestro Presidente del Partido, Gustavo Rossi, en su nota de 22/06/2020, con respecto al tema Vicentín, «…fue una decisión apresurada que produjo inconvenientes de orden legal y político, despertando un viejo antagonismo Campo versus kirchnerismo, situación de confrontación que el país no está dispuesto a tolerar y menos aún en plena pandemia del coronavirus».
El poder ejecutivo intervino la empresa por sobre la Justicia, sin consultar con los gobernadores afectados, ni con las organizaciones representativas del sector. El proyecto, provocó una rebelión prácticamente unánime de la población de Avellaneda y Reconquista en la provincia de Santa Fe. El Partido Laborista decidió acompañar en la crítica y apoyar a los diputados de Hacemos por Córdoba junto con el gobernador Schiaretti, de votar en contra ante cualquier intento de expropiación. Tema no menor para Córdoba, ya que el sector agrario es uno de los principales resortes económicos de la provincia, y mucho de sus productores están vinculados a Vicentín. Una cuarta deuda de la empresa, corresponde a granos no pagados a miles de productores, donde más de 500 son de nuestra provincia. Por tal motivo, como Partido Laborista no nos desentendemos y somos expresión de esa legión de productores y de trabajadores directos e indirectos que son parte de ese complejo productivo y exportador argentino.
La lógica confrontativa que asume el gobierno nacional en distintas circunstancias, con iniciativas que nacen del sector liderado por la vicepresidente, horadan la autoridad presidencial y han generado en estos últimos días protestas masivas en los principales centros urbanos. Desde nuestro espacio, consideramos que el presidente Fernández, consolida su figura, y puede resolver de manera efectiva los problemas, cuando se apoya en una composición de fuerzas más amplio que su propio frente electoral. La crisis actual, demanda una autoridad fortalecida, la resolución firme de sacar al país del riesgo de default y formular una propuesta de reformas que permitan una recuperación económica sostenible en la era pospandemia. Se hace necesario una plataforma de acuerdos, que se construyan con la participación de amplios sectores del oficialismo y la oposición, con gobernadores e intendentes, con empresarios y sectores sindicales, Estamos dispuestos a colaborar en esa articulación de corrientes distintas, y neutralizar a los intereses que buscan dividir para reinar. El difícil camino de la reconstrucción del país, vuelve indispensable una estrategia de consensos.
José Luis De Cerchio
Secretaria de Prensa y Difusión
Partido Laborista de Córdoba
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