Alberto Fernández está evaluando extender el aislamiento social, preventivo y obligatorio hasta el próximo 10 de mayo, asumiendo que el pico de la pandemia llegaría a la Argentina en los próximos 30 días.
El Presidente, como ya probó que el aislamiento aplacaba la curva de contagios, no quiere dar el brazo a torcer con los términos básicos del aislamiento, pero a su vez está analizando con el gabinete y los expertos qué actividades puede flexibilizar en algunas provincias.
Según Infobae, Fernández está en constante diálogo con los Gobernadores e Intendentes quienes le explican cómo está la situación en sus respectivos territorios. A su vez, el portal remarca que si bien el Presidente tiene en agenda flexibilizar algunos rubros, no están en discusión los espectáculos públicos, la apertura de fronteras para extranjeros y toda actividad productiva que implique contacto social en los espacios públicos.
De esta manera pretende seguir evitando las aglomeraciones y cuidar a los argentinos de la mejor forma posible.