
Fue elevada a juicio la causa que investiga el homicidio de Marcelino Duarte (alias “el paraguayo”) ocurrida el 22 de octubre de 2016 en el Valle de Anisacate. Por el hecho se encuentran detenidos su ex pareja Norma Benitez (50) y un amigo de ésta, Mario Frutos (64).
La mujer está imputada de “Homicidio doblemente calificado por el vínculo y alevosía”; y Frutos de “Encubrimiento agravado y tenencia ilegal de armas de fuego”. La calificación legal que recae sobre Benitez implica una pena de cadena perpetua. Será alguna de las Cámaras en lo Criminal quien determine o no la culpabilidad de ambos; aunque los testimonios y las pruebas los pondrían directamente en la escena del crimen.
El hecho ocurrió en una vivienda ubicada en la intersección de las calles Siete Colores y Colibrí entre las 21:45 y las 22:30 hs. Según se desprende de la investigación, “el paraguayo” estaba sentado bebiendo cerveza en el hall de entrada, dando la espalda a la puerta principal y mirando hacia la calle. Hacía pocos minutos que había recibido un pedido de un bar restaurante ubicado a la vera de la ruta 5, en el que le habían traído un sandwich de milanesa y bebida. La mujer, en tanto, se encontraba dentro de la vivienda, más precisamente en su habitación.
Al parecer, minutos antes habían discutido como muchas veces lo hacían (prueba de ello es que había una orden de restricción entre ambos por agresiones físicas y verbales de parte de este hombre hacia su pareja). La mujer “cansada de los malos tratos”, según advirtió, se aproximó a Duarte, y lo golpeó con un hierro en reiteradas oportunidades hasta darle muerte por “traumatismo craneoencefálico”, según corroboraron los facultativos horas después.
Al encontrarse con el cuerpo sin vida en el lugar y cubierto de sangre, la mujer salió de la casa, pechó la camioneta porque no arrancaba y se fue a la casa de sus hijos. Uno de ellos llamó a la Policía, dando la primera versión de los hechos -según ella misma había aclarado- “se pegó un tiro”; argumento que se sostuvo muy poco tiempo debido a las pruebas.
Al regresar a la casa aguardando por personal policial, le pidió a Frutos que vaya (quien tendría una relación sentimental con ella), por lo que éste le retiró la billetera a la víctima y se llevó tanto ésto como el hierro que le dio muerte a su casa; elementos que fueron descubiertos por la Policía tiempo después en uno de los allanamientos.
Foto: la casa donde se produjo el homicidio, a pocas horas de lo ocurrido.
Comentarios: