
Jóvenes contentos, redoblantes, bombos, murga, gaseosa y torta para todos. Así despidió la Congregación de los Salesianos a sus pupilos que terminaban el primer año del noviciado. En diálogo con «Desayuno Online» el superior para el Centro y norte de la Argentina padre Manuel Cayo detallaba el evento: «tenemos trece estudiantes que avanzan en sus estudios de los veinte que ingresaron, y doce nuevos novicios que iniciarán sus estudios ahora en la sede Alta Gracia». El festejo seguirá hasta hoy en la tarde.
Había familias de los estudiantes que culminaban el año de noviciado y de los que lo iniciaban, todo en un clima de algarabía que sirve como plato previo a la Congregación para el día de la Virgen, para el que cada vez falta menos.
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